Autoconsumo, movilidad sostenible y digitalización, los pilares de la comercialización
Factorenergía ve un cambio disruptor en el sector eléctrico donde los agregadores de la demanda serán un agente protagonista.
7 septiembre, 2020 12:44Noticias relacionadas
Las comercializadoras se enfrentan a un cambio de paradigma y solo aquellas que se adapten podrán ampliar las posibilidades de su negocio. "Factorenergía quiere ser un agente impulsor de esa transformación a la que se enfrenta el sector", han dicho a Invertia fuentes de esta compañía que suministra electricidad y gas natural y que es la veterana de las comercializadoras independientes.
Comenzó su andadura hace ya 20 años pero solo podía comercializar electricidad a grandes empresas. Hasta 2009, que se produjo la liberación del mercado eléctrico, no pudo abrir su oferta al sector doméstico y de pequeña pyme.
"Ahora se nota un cambio en la percepción de los consumidores, especialmente de las ciudades de Madrid y Barcelona", continúan las mismas fuentes, "por eso es el momento de desarrollar nuevos negocios como es el autoconsumo, no solo para viviendas unifamiliares sino también para que sea compartido, aunque vemos otras posibilidades como los agregadores de la demanda, las comunidades energéticas y la gestión de la demanda como nuevos servicios que las comercializadoras podemos ofrecer en los próximos años".
Autoconsumo compartido
La comercializadora Factorenergía considera que no hay otro camino que la transición energética como vía para la descarbonización de la economía y la lucha contra el cambio climático. Por ello, se ha desarrollado con fuerza una nueva línea de negocio que promociona el autoconsumo, tanto entre particulares, como entre comunidades de vecinos y empresas, así como en el fomento de la movilidad sostenible tanto de vehículos eléctricos como de gas natural.
Esta línea de negocio de Transición Energética ha aportado dos millones de euros a la facturación del Grupo en 2019 pero se han tenido que enfrentar a varios obstáculos. "Nuestra mayor dificultad en el caso de las instalaciones de autoconsumo ha sido con los ayuntamientos", explican, "por eso pedimos que los requisitos para su desarrollo se pueda homogeneizar".
Una demanda que comparte con el resto del sector de autoconsumo que ve como en un municipio se piden unos permisos mientras que en otros no, o se consideran necesarios unas tramitaciones que en otros no existen, "además, en general, para instalaciones tan pequeñas se piden proyecto de obra pero sería mucho más operativo y lógico que fuera una simple comunicación al ayuntamiento como otro tipo de obras que se realizan en las viviendas".
"Actualmente promocionamos electricidad y gas natural a más de 70.000 empresas y miles de hogares en todo el territorio nacional y representamos a más de 3.000 productores de energías renovables", añaden, "pero la nueva línea de negocio tendrá mucho recorrido a partir de ahora".
Nuevos nichos de negocio
Además del autoconsumo, la compañía mira con buenos ojos la movilidad eléctrica y la digitalización. "Hasta la fecha tenemos instalados más de 150 puntos de recarga sobre todo en comunidades de vecinos, allí donde las grandes eléctricas no quieren llegar, pero es donde tenemos que estar si queremos que se extienda el uso del vehículo eléctrico".
El objetivo es estar en toda la cadena de valor y en todos los segmentos tanto doméstico, comunidad de propietarios y empresas.
Por el momento, la compañía cuenta con una cartera saneada. Ha logrado una facturación de 405 millones de euros en 2019, lo que representa un crecimiento interanual del 4,9% en relación al ejercicio anterior, mientras que el beneficio consolidado antes de impuestos ha ascendido a los 9,5 millones, duplicando el resultado del ejercicio precedente.
Una parte importante de este crecimiento se basa en el fuerte incremento de la base de clientes de Factorenergia, tanto en el segmento empresarial como en el doméstico, hasta alcanzar los 105.000 usuarios.
Crisis de la Covid en el mercado eléctrico
Además, ha firmado PPAs (Power Purchase Agreement) por una potencia de unos 180 MW eólicos y algunos fotovoltaicos por alrededor de los 15 años. "El mercado de los PPAs ha tenido un crecimiento exponencial en los últimos dos años pero no creo que vaya a haber una crisis de este modelo por la llega de la Covid, porque es un problema coyuntural", aseguran.
"Se prevé que en 2021 subirá el precio en el mercado mayorista hasta los 45 euros/MWh pero ciertamente no se esperan precios más altos".
Sin embargo, en tres o cuatro años el precio del pool podría estar entorno a los 30 euros/MWh con la incorporación cada vez más masiva de las renovables, y puede que en algún momento puntual haya que encender los ciclos combinados.
Por eso, desde el punto de vista de una comercializadora de electricidad, "no hay que ver los PPAs como un negocio a corto plazo sino como una cobertura de precios a largo plazo".
De hecho, en su caso reconocen que "nuestro objetivo de cobertura es del 45% y los cálculos que hemos hecho han sido teniendo en cuenta los precios en los que se firmaron los PPAs y los futuros".