La compañía española de ingeniería y fabricación de estructuras fotovoltaicas Esasolar ha desarrollado el primer sistema del mundo que protege del viento y de manera integral a los seguidores solares ('trackers') instalados en las plantas fotovoltaicas, informó la compañía.
En concreto, este pionero sistema, denominado ESAblock, garantiza la estabilidad de los seguidores solares y evita que se produzca el efecto conocido como 'galloping' o 'fluttering', una inestabilidad aeroelástica causada por el viento, a cualquiera que sea la velocidad del viento.
Así, esta tecnología soluciona uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las grandes instalaciones de energía fotovoltaica, el viento, garantizando su protección frente al mismo.
El director técnico de Esasolar, Antonio Jesús Martín Nuñez, destacó que los sistemas de protección disponibles en el mercado hasta ahora empiezan a funcionar solamente cuando el viento supera la velocidad de trabajo de los 'tracker' "que, por regla general, suele ser inferior a los 75 kilómetros/hora".
"A menudo ocurre que, a velocidades de viento inferiores se pueden dar los efectos catastróficos de 'galloping' o 'flutter', incluso con el sistema de protección tradicional activado", añadió al respecto.
Por su parte, el director general de Esasolar, José Antonio Maldonado, consideró que la gran aportación del sistema es que combina la versatilidad y eficiencia de los seguidores solares (estructuras que se mueven para orientarse siguiendo al sol) con la seguridad de las estructuras fijas, que permanecen siempre en la misma posición.
El desarrollo de esta tecnología se ha llevado a cabo en el centro de investigación que la compañía española tiene en La Roda de Andalucía (Sevilla).