El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha mostrado sus dudas sobre si las subastas son la mejor vía para impulsar el desarrollo de las renovables, ya que si hay inversores interesados, no sabe "por qué lo tiene que asumir el Gobierno".
En una conferencia con analistas para presentar el nuevo plan estratégico del grupo para 2020-2025, Galán insistió en que la política energética está en manos del Gobierno de cada país, "por lo que le compete hacer subastas", aunque señaló que la decisión de acudir a estos procesos está en manos de las compañías.
Asimismo, aseguró que la energética estudiará si acude o no a la subasta de renovables que prevé lanzar el Gobierno antes de que acabe este año, una vez que se aprobó un nuevo marco para las pujas de nueva capacidad 'verde'.
Galán recordó que Iberdrola ha acudido a subastas en otros países, con un éxito del 70% en las que se ha presentado, aunque afirmó que el grupo no tiene por sistema participar en todas las pujas, "solo en algunas de ellas", ya que tiene "diferentes caminos", como los 'PPA's' (contratos de compra venta a largo plazo) con grandes empresas, para llevar a cabo sus proyectos renovables.
Fin nuclear adelantado
Respecto a las centrales nucleares, el presidente de Iberdrola insistió en que se pierde dinero con ellas". Por lo que, a pesar de existir un plan acordado para abordar el cierre del parque español entre 2027 y 2035, podría suceder que se vieran obligadas a cerrar "más rápidamente".
El directivo no concedió ningún papel a futuro a las nucleares en la transición energética, ya que, con motivo de la caída constante en los costes de las energías renovables, no cuentan con ninguna ventaja competitiva.
"Debido a temas de seguridad no es fácil que bajen sus costes, precisan de uranio que es costoso, y no hay una solución clara sobre qué podemos hacer con los residuos. Su 'capex' y 'opex' es mayor que en las renovables", añadió al respecto.
Galán sí que apostó por las centrales de bombeo para almacenar electricidad como un componente "crucial" de respaldo para las renovables. "Creemos en el almacenamiento. Cuanta más renovable se incorpore, más almacenamiento será necesario", añadió.
Precios de la electricidad
En lo que respecta a los precios a futuro de la electricidad ante la masiva entrada de renovables en los próximos años, Iberdrola estima que podrían ser entre unos cinco o diez euros inferiores por megavatio hora (MWh) con respecto a los anteriores, con una horquilla entre los 40 y 50 euros por MWh.
En este sentido, Galán aseguró que el precio no es algo que "obsesione" a la compañía. Para el presidente de la energética, su descenso no afecta especialmente al resultado, con un impacto que estimó de entre un 0,3% del resultado bruto de explotación (Ebitda) y del 0,5% en el beneficio neto por cada variación de un euro. Además, añadió que cuentan además con la cobertura que representan los contratos de compraventa a largo plazo.