Ya está en marcha la cuenta atrás para canalizar los 72.000 millones de los fondos europeos adelantados en los Presupuestos para la recuperación económica. De esa cifra, el 37% irán destinados a la transición ecológica, un abanico enorme de sectores que van desde la protección a la biodiversidad hasta una transformación del sector industrial.
Y Endesa no quiere perder el tren. Por eso, su consejero delegado, José Bogas, en un encuentro con los medios, ha confirmado que "la compañía ya ha presentado al Gobierno sus 110 proyectos".
La suma de todos ellos supone unas inversiones de 19.000 millones de euros, de los cuales "elegibles para recibir ayudas estaríamos hablando de unos 16.000 millones". Una cifra que iría a más ya que se trata de “fortalecer la cadena de valor para ser tractor de otras empresas, como se hizo con la eólica”.
Efecto tractor
El máximo responsable de la compañía ha recordado que "las ayudas europeas son tractores de fondos privados", tal y como dijo en su momento el director general de Asuntos Económicos de la Presidencia del Gobierno, Manuel de la Rocha, actualmente encargado de la oficina que coordinará la gestión de los fondos de rescate europeo.
"Por cada euro que recibamos de Europa, habrá otros tres o cuatro euros de fondos privados", ha puntualizado. "Eso significa que habrá proyectos que puedan recibir ayudas de hasta el 50% del total del coste y otros solo el 10%. Se podría decir que la ayuda europea representará entre el 20 y el 25% del total del coste de esos proyectos".
De hecho, el Gobierno calcula que podría movilizar hasta 500.000 millones de inversión privada como resultado del efecto del plan de recuperación para articular los fondos europeos.
Transición justa
Bogas ha explicado también las categorías en las que se encuentran los proyectos que Endesa ha presentado. "Transición justa, la transformación de las Islas Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla (zonas donde tiene la práctica totalidad de la generación), hidrógeno, rehabilitación de edificios y eficiencia energética, transporte sostenible o desarrollo de redes inteligentes, entre otros", ha insistido.
En el caso de transición justa, su objetivo es crear valor compartido con todos los agentes locales afectados y aplicar criterios de economía circular para conseguir nuevos modelos empresariales que funcionen en los diferentes entornos.
De hecho, Bogas ha confirmado que las dos últimas centrales de carbón aún propiedad de la compañía cerrarán el próximo mes de julio de 2021 "si todo sigue con el ritmo adecuado". Se unirán así a todas las restantes, que se apagaron en julio pasado.
Para todas las centrales de carbón peninsular han presentado los Planes Futur-e, cuyo objetivo es contribuir a mitigar el impacto que estos cierres puedan tener sobre la población local hacia un modelo de generación sin emisiones.
Hidrógeno verde
Por otro lado, la energética ha hecho una fuerte apuesta por proyectos de hidrógeno verde, y por ello priorizará los proyectos que tengan sentido para las ayudas europeas, como en el caso de la descarbonización de las islas.
Hasta un 20% del paquete de "planes verdes" que la eléctrica propiedad de Enel ha presentado al Gobierno están relacionados con el hidrógeno. De esos planes, ha focalizado proyectos en las islas. Endesa está desarrollando proyectos de este tipo tanto en Canarias como en Baleares.
Proyectos que van desde la generación con turbinas, adaptación en la programación de la generación actual, biocombutibles (como paso de transición), hasta instalación en polígonos industriales, de los que tienen hasta tres proyectos.
Pero para que el hidrógeno verde sea competitivo, Bogas ha pedido al Gobierno que "haya un reglamento más sencillo, que quite determinadas cargas en la factura para que se pueda bajar el coste de la electricidad", ya que "no tiene sentido" que el 50% del coste del recibo de la luz "sea absolutamente prescindible, ya que son políticas energéticas o impuestos".
Aún así, aunque el hidrógeno verde es importante, "la electrificación es el camino más simple para la descarbonización. El hidrógeno verde debe ser un complemento, no un competidor", insiste el CEO de Endesa.
Creación de empleo
Para José Bogas, estos proyectos pueden ayudar de manera importante a la recuperación de nuestro país, con una creación de empleo de 214.000 puestos de trabajo acumulados y una reducción de emisiones estimadas de 13,6 millones de toneladas de CO2 al año.
Sin embargo, ha puntualizado que "a lo largo de este camino, habrá empleos que se perderán y otros nuevos se crearán, habrá que adaptarse a esos cambios pero la compañía no se plantea ningún ajuste de plantilla en el horizonte".
Por último, el consejero delegado de Endesa defiende que las medidas que se adopten sean para descarbonizar, no como ocurrió en el pasado con las subvenciones para las renovables, que se pagaron únicamente por el cliente eléctrico.