Europa está a pocos meses de poner en marcha la reactivación de la economía a través de los fondos europeos. Y los proyectos que quieran formar parte tendrán que superar una serie de pruebas de idoneidad. "La transición energética es absolutamente relevante en este escenario post-Covid", ha dicho Ana de la Cueva, secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Ministerio de Asuntos económicos y Transformación Digital, en el Encuentro de Energía organizado por IESE y Deloitte.
"En el mundo nos enfrentamos a una crisis sin precedentes que tendrá un efecto devastador sobre nuestra sociedad", ha dicho por su parte Daniel Calleja, director general del Servicio Jurídico de la Comisión Europea.
"Cuesta creer que hace tan solo un año tomaba posesión el nuevo equipo de la Comisión Europea liderado por Ursula von der Leyen, con un programa muy ambicioso a cinco años: el Pacto Verde, que se aprobó en diciembre pasado, la agenda digital, un plan para una economía innovadora y competitiva, y la promoción de los valores europeos".
Y ahora, "solo esperamos a que a finales de 2022 estemos en una situación económica similar a la prepandemia".
Para el representante de la Comisión Europea, lo más importante en estos momentos es la Estrategia de la Recuperación, lo que se llama Next Generation EU. "Europa va a ir a los mercados y nos vamos a endeudar en los próximos 30 años para responder a esta situación de emergencia".
Descarbonización
La prioridad es doble, "la descarbonización y la digitalización", ha recalcado, pero sobre todo "incrementar las cadenas de valor, tener una política industrial más sólida con una mayor inversión en educación y en salud".
Eso significa orientar los planes hacia las tecnologías limpias, las renovables, la eficiencia energética y la rehabilitación de edificios, el transporte sostenible y el almacenamiento para la electrificación. "Además, a todo ello hay que sumarle una mayor conexión digital, una modernización de las Administraciones públicas y de la industria, y un importante esfuerzo en formación".
"El sector energético es el protagonista de esta recuperación, es el elemento tractor que puede crear empleo y crear riqueza". Y como conclusión ha recordado "que las grandes crisis siempre han traído grandes cambios y hay que aprovecharlos".
Y para ello, se cuenta con 750.000 millones de euros. "Se puede ver como un momento Hamilton, el secretario de Estado de EE. UU. que consolidó la unidad del país con la creación de la Reserva Federal", ha añadido Calleja.
Junto con los presupuestos europeos, de 1,1 billón de euros, "sumamos 1,185 billones para inyectar suficiente cantidad para relanzar la economía".
Crear cadenas de valor
"Hay que desarrollar cadenas de valor europeas y por supuesto, bajo la clave de neutralidad tecnológica", propone Pedro Larrea, director general de Gestión de la Energía y Redes de Naturgy. "Debemos dejar de depender de China para el suministro de equipos".
Reconoce que "las empresas no solo necesitamos los fondos europeos, porque hay mucha financiación ahí fuera. Más que los fondos, es necesaria una regulación y unos procesos administrativos ágiles. Todas tenemos muchos proyectos innovadores, sobre todo de hidrógeno, de gases renovables o de transporte sostenible, pero tenemos que agilizar todo el proceso si queremos tener éxito".
"Estamos hablando de fondos europeos, pero podríamos hablar de la profunda transformación regulatoria que estamos viviendo para llevar a cabo la transición energética", dice por su parte José Casas, director general de Relaciones Institucionales y Regulación de Endesa.
"Sin embargo, tenemos un precio de la electricidad de los más caros de toda Europa, y unas cargas fiscales muy elevadas en la factura de la luz".
Además, "habría que modificar el diseño de mercado, dando paso a los mecanismos de capacidad para el almacenamiento, el bombeo y los ciclos combinados". Y por último "incentivar la eficiencia y la rehabilitación".
Recuperar la credibilidad
"España tiene que recuperar la credibilidad en la Unión Europea, y esta es la oportunidad para demostrarlo", señala Ángel Bautista, director de Relaciones Institucionales y Coordinación Regulatoria de Repsol.
"Nos jugamos muchísimo, pero donde tenemos que poner el foco es en la industria. Se necesitaría crecer hasta que representara el 20% del PIB, debería ser nuestro principal activo estratégico".
"Estos fondos nos tienen que ayudar a impulsar un sector que no era sostenible ni ambiental ni por seguridad de suministro", apunta por su parte Agustín Delgado, director de Innovación, Sostenibilidad y Calidad de Iberdrola. "Y en el futuro además seremos más competitivos y tomaremos posiciones de ventaja a nivel global".
Y pone como ejemplo el vehículo eléctrico. "Parece ser que se confirma como el sistema de movilidad más interesante de futuro, por ser la solución a la descarbonización y por competitividad, pero es el momento "de crear una cadena de valor propia".