Las importaciones de crudo a España alcanzaron en el primer trimestre del año los 13,048 millones de toneladas, lo que supone un descenso 12,7% con respecto al mismo periodo del ejercicio pasado. Es su nivel más bajo para un primer trimestre desde 2011, según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), pero siguen la estela de 2020.
En marzo, las importaciones prosiguieron con su tendencia a la baja de los últimos meses y ascendieron a los 4,47 millones de toneladas, lo que representa un descenso del 11,7% con respecto al mismo mes del año pasado.
En el mes se importaron 30 tipos de crudo procedentes de 15 países. Nigeria, con 1,294 millones de toneladas -el 28,9% del total- fue el primer suministrador de crudo en marzo, con un incremento del 3,9% interanual y con las entradas de crudo más elevadas desde febrero 2020.
Le siguió México, con 510.000 toneladas -el 11,4% del total-, con las menores importaciones de crudo en nueve meses y un descenso del 29% frente a marzo de 2020.
Por su parte, las importaciones procedentes de los miembros de la OPEP representaron el 55,6% del total, la mayor cuota desde febrero 2020, a pesar de registrar un descenso del 11,5% frente al mismo mes del año pasado. También presentaron descensos interanuales en el primer trimestre del año (-19,5%) y en el año móvil (-34,0%).
Por regiones, África, con el 42,8% del total, se mantuvo como principal área de abastecimiento, aunque registró un descenso del 12,8% interanual.
Le siguieron América del Norte, con el 20,6%, aunque cayó un 16,6%, Europa y Euroasia (18,1%; +95,4%), única zona que registra incremento, Oriente Medio (12,7%; -32,5%) y América Central y del Sur (5,7%; -49,5%).