Madrid recibirá 124 millones de euros del programa de ayudas para la inversión en autoconsumo anunciado por el Gobierno. Enmarcado en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y el reparto de los fondos de recuperación europeos ‘Next Generation UE’, esta partida permitirá la instalación de 411 MW nuevos de autoconsumo.
Para la asociación fotovoltaica UNEF esta partida supone una gran oportunidad para el autoconsumo. No solo sirve para continuar siendo un instrumento vital en la lucha contra el cambio climático, sino también para ser un elemento tractor de la recuperación económica española.
De los 124 millones de euros, 25,7 millones subvencionarán instalaciones de autoconsumo en el sector industrial y agropecuario, 43,7 en el sector servicios y 54,6 en el segmento residencial y de las Administraciones Públicas.
Según los cálculos que ha realizado UNEF, estas ayudas se traducirían en 411 MW nuevos de autoconsumo en Madrid. Por segmentos, la estimación es que permitirán la instalación de 123 MW nuevos en el sector industrial y agropecuario, 171 MW en el de servicios y 117 MW en el segmento residencial y Administraciones Públicas.
Las Comunidades Autónomas son las encargadas de gestionar la distribución de estos fondos. UNEF valora que se haya previsto el acceso a estas partidas por concurrencia simple. También señala que la clave del éxito de este reparto es que la gestión de estas ayudas se lleve a cabo de manera ágil y rápida. Además, para conseguir el efecto deseado, será necesario que se dote al personal responsable de esa gestión de los medios adecuados.
Eliminación licencia de obras
Madrid -además de Asturias, Cantabria, Murcia, La Rioja y País Vasco- es una de las Comunidades Autónomas en las que todavía no se ha eliminado el requisito de la licencia de obras para autoconsumo, una de las principales barreras a su desarrollo.
Hasta el momento, la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha conseguido que 11 Comunidades Autónomas aprueben la adecuación de las leyes autonómicas de urbanismo a la realidad del autoconsumo para que estas instalaciones se tramiten por la vía de la comunicación previa o la declaración responsable, lo que agiliza considerablemente la tramitación administrativa.
“La mejora de la agilidad de las tramitaciones es, en este momento más que nunca, clave para que se reactive la actividad de todo el entramado de autónomos y empresas que pueden hacer del autoconsumo una vía más de recuperación económica y generación de empleo en los municipios tras la crisis actual por la COVID-19”, señala José Donoso, director general de UNEF.
La licencia de obras es un trámite que no se ajusta a la naturaleza de una instalación sobre cubierta y que conlleva retrasos de hasta ocho meses en la tramitación del proyecto. Supone un impacto en el coste de la instalación y desanima a los ciudadanos que quieren apostar por el autoconsumo para reducir su factura eléctrica y contribuir a la lucha contra el cambio climático.