Alcoa insiste en vender la planta de San Cibrao a la Sepi para derivar posibles acciones jurídicas en su contra
Alcoa desmiente al Gobierno sobre el pacto al que supuestamente llegó la ministra de Industria, Reyes Maroto, en su visita a la sede central en EEUU.
23 julio, 2021 01:24Noticias relacionadas
El 'culebrón' de la planta de aluminio que Alcoa quiere cerrar en San Cibrao (Lugo) no termina de aclararse. El problema es que la multinacional estadounidense desmintió a la ministra de Industria, Reyes Maroto, cuando anunció a bombo y platillo que había conseguido desbloquear el proceso de venta y que se haría en el plazo de dos meses, nada más salir de una reunión con su CEO en Pittsburgh (EEUU).
Su presidente y primer ejecutivo, Roy Harvey, advirtió que de vender la fábrica nada de nada si no está la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) de por medio.
Pero ¿qué razón le lleva a Alcoa a pedir que esté la SEPI de intermediario, si se sabe que el objetivo es vendérselo a un tercero? Por el momento, hay media docena de empresas que se han mostrado interesadas en comprar la planta.
Lío judicial
"Alcoa está envuelta en un engorroso proceso judicial por su actuación en la venta de sus plantas de La Coruña y Avilés, que ahora están bajo el paraguas de Alu Ibérica", señalan fuentes industriales a este diario.
En 2019, Alcoa vendió ambas fábricas por un euro a Parter Capital y Blue Motion tras un largo proceso tutelado por las Administraciones, que arrancó a finales de 2018 cuando la multinacional estadounidense anunció su intención de cerrarlas y despedir a la plantilla con un ERE.
Pero lejos de quitarse un problema, se le ha multiplicado por todos los frentes. "La Justicia española ya ha dictado varios autos en los que relata que en los sucesivos procesos de compraventa que afectaron a las plantas se pueden identificar operaciones que evidenciarían la descapitalización de las empresas Alcoa Inespal Avilés S.L. y Alcoa Inespal Coruña S.L." añaden las fuentes.
Y eso es lo que quiere evitar. "El objetivo es que si Alcoa vende a la SEPI y luego se hace con la planta un tercero, todos los problemas que pudieran derivar tendría que asumirlos la institución pública española, y podría irse 'de rositas' dejando el 'pastel' a otros, en este caso a la Administración española".
Cambio en Industria
Tras un primer intento frustrado en otoño pasado, a principios de este año Ministerio de Industria, Xunta de Galicia y Alcoa se sentaron para negociar el futuro de la planta. Y ya entonces la participación o no de la SEPI era uno de los elementos clave en la discusión.
Para Alcoa era una condición sine qua non y todo iba bien hasta que en mayo pasado el Gobierno decidido dar 'marcha atrás' en el proceso y anunciar que no estaba dispuesto a que SEPI fuera la que se hiciera con la planta para después transferírsela a un tercero.
"Alcoa lamenta que no incluyan una venta directa a SEPI. Durante la reunión, Harvey accedió a revisar la propuesta del Gobierno, pero no se comprometió a realizar una venta directa a un tercero", explicó Alcoa en un comunicado oficial tras la reunión de esta semana con la ministra Reyes Maroto.
El grupo estadounidense indica en el mismo comunicado que está convencida de que la venta de la planta a SEPI era la forma de dar mayor seguridad, tanto a los trabajadores como a la empresa.
"Es evidente que no tiene sentido que habiendo hasta seis compradores, Alcoa se niegue a venderles la planta, y que solo lo quiera hacer a la SEPI, para que sea el organismo público el que asuma todas las reclamaciones futuras que puedan hacer por la situación en la que está San Cibrao", añaden las fuentes industriales.
Manifestación y huelga
Este diario ha hablado también con los sindicatos que se han mostrado sorprendidos con el cruce de declaraciones de la ministra de Industria y del CEO de Alcoa poco después de terminar la reunión.
"No entendemos nada. Hemos solicitado una reunión con Industria para que nos aclare cómo es posible que la ministra haya dicho una cosa y Alcoa la contraria, no tiene ningún sentido. Y si no se comprendieron en la reunión, ya que está en Estados Unidos, que la ministra vuelva a Pittsburgh para resolverlo", señalan.
Por el momento, el comité de empresa se reunirá este viernes para decidir si convocan nuevas manifestaciones y huelgas para exigir una solución.