Iberdrola y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) han suscrito un préstamo verde por 550 millones de euros para impulsar las redes inteligentes en España, contribuyendo a una mayor electrificación de la economía, alineada con el objetivo de neutralidad climática europea y española a 2050, informaron en un comunicado conjunto.
En concreto, este acuerdo contribuye al desarrollo del plan de inversiones en redes que i-DE, la distribuidora de Iberdrola en España, desarrollará entre 2021 y 2023 por importe de casi 1.500 millones de euros.
La ejecución de este plan de inversión de la distribuidora de Iberdrola impulsará la recuperación verde de la economía y el empleo, al permitir el mantenimiento de unos 10.000 puestos de trabajo anuales en España durante el periodo de implementación, según estima el BEI.
Además, el 68% de las inversiones se llevarán a cabo en las regiones de cohesión, en un país con tasas de desempleo significativamente superiores a la media de la UE.
Así, esta financiación contribuirá a cumplir un triple objetivo: atender el crecimiento de la demanda -asociada a la electrificación del transporte y la climatización- y de la producción -más renovables y generación distribuida-; mejorar la resiliencia de la red eléctrica para afrontar los retos del cambio climático; y promover la modernización en los procesos sobre esta infraestructura de distribución eléctrica, siempre atendiendo a criterios de sostenibilidad.
Además, el programa de inversión cubierto por esta operación contribuye al objetivo de política pública de energía sostenible de la entidad financiera, en consonancia con los criterios de la Hoja de Ruta del Banco del Clima. Las inversiones también apoyarán el aumento de la electrificación del sector de la calefacción y la movilidad, en línea con los objetivos del Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC) de España.
El Banco de la UE apoya esta operación a través de un préstamo verde (green loan), un tipo de financiación cuyas características cumplen íntegramente con los requisitos definidos en su programa de Bonos Climáticamente Responsables (Climate Awareness Bonds) y es, por tanto, susceptible de asignarse a su cartera de operaciones de préstamo financiadas mediante la emisión de dichos bonos.