El conflicto bélico en Ucrania y la subida de precios energéticos han provocado un tsunami en el mercado de fusiones y adquisiciones (M&A, por sus siglas en inglés). Sin embargo, el sector de la energía (al igual que el de las infraestructuras) es "anticíclico, es decir, que no se mueve tanto por la situación macro, sino que tiene una visión a largo plazo", explican fuentes jurídicas a EL ESPAÑOL-Invertia.
"Hay mucho equity, mucha liquidez en el mercado, y el sector de la energía sigue levantando mucho dinero. Y, sobre todo, se abre un 'gap' de crecientes expectativas a lo largo de este verano, como siempre ocurre en un periodo precrisis. A partir de septiembre, se espera que la subida de la deuda provoque cierto relajamiento", añaden.
En un escenario de cambios y transformaciones por parte de las organizaciones, las estrategias de ESG y los proyectos ligados a la transición energética son clave para la mayoría de las organizaciones.
La compra minoritaria, tendencia en 2022
En 2021 se observó un crecimiento de la intervención de los gobiernos europeos en fusiones y adquisiciones. No solo España aprobó un escudo "antiopas" de sectores críticos, en marzo de 2020 en pleno confinamiento por la pandemia, sino que otros países ya contaban con ello o lo pusieron en marcha poco después. Es el caso del Reino Unido, que lanzo la Ley de Seguridad e Inversión Nacional desde enero pasado.
La 'acción de oro' de la normativa española es relativamente similar a la que tienen, por ejemplo, Francia o Alemania. Es la única manera de tener unas empresas fuertes de cara al resto del continente.
Por eso, "la tendencia son entradas en capital de compañías con participaciones minoritarias, que eviten el control del Gobierno, o también las 'joint-ventures' para buscar negocios en el extranjero", añaden las mismas fuentes.
Pero reconocen que "a partir de septiembre, cuando se encarezca la deuda, estas operaciones serán mucho más selectivas".
Proyectos renovables en desarrollo
Aún así, el año pasado las empresas se centraron con cada vez más urgencia en las fusiones y adquisiciones, como respuesta al imperativo de desarrollar resiliencia, que aceleró la crisis tras la pandemia, y como una vía rápida al imperativo de la transformación empresarial.
Según el informe "Global M&A Outlook 2022" del bufete de abogados internacional con sede en Londres Herbert Smith Freehill, "hay mucho más activismo de fusiones y adquisiciones en 2022, ya que seguimos viendo mercados públicos de fusiones y adquisiciones ocupados y empresas que buscan realinear sus estrategias y reposicionarse para abordar ESG, la digitalización u otros impulsores fundamentales de la reforma".
"Y en el caso del sector energético, España reúne los requisitos adecuados para que se haya despertado mucho interés por toda la industria que se está moviendo en desarrollo de parques renovables".
Los fondos de inversión prefieren invertir en greenfield, es decir, en proyectos que ya cuentan con todos los permisos administrativos y están en proceso de desarrollo y construcción. "Los parques que ya están en funcionamiento (brownfield) no son tan interesantes, no despiertan el interés de los fondos de inversión, pero hay mucho dinero en el mercado y, por tanto, se toma cada vez más riesgo", añaden las fuentes conocedoras.
"Las renovables tradicionales, eólica terrestre y fotovoltaica, seguirán siendo el foco para los inversores, las nuevas tecnologías, como la eólica marina o el almacenamiento cuesta más despertar ese interés".
52.000 millones en operaciones
Según el informe de Herbert Smith Freehill, "la sorprendente resiliencia de las fusiones y adquisiciones del 2021 se está consolidando en 2022". Como en la mayoría de los países, la actividad de M&A en España se ha ido recuperando de forma constante de los efectos de la pandemia.
Según datos de Refinitiv, el mercado español de M&A registró en 2021 un incremento interanual del 38% en volumen y del 35% en valor de las transacciones. Los datos son alentadores y, aunque hay que tomarse las cifras con cautela, parece que las fusiones y adquisiciones se han mantenido resistentes, casi alcanzando los niveles previos a la pandemia en términos de transacciones. Y ha sido así especialmente en el sector de capital privado y desde la perspectiva del crecimiento del tamaño de las transacciones.
Los inversores extranjeros y las adquisiciones entrantes siguen dominando la actividad de fusiones y adquisiciones en España por valor de los acuerdos. De las más de 1.000 operaciones entrantes y nacionales por valor de más de 52.000 millones de euros anunciadas en 2021, más del 80% en valor fueron adquisiciones entrantes. Aunque el volumen de la actividad transaccional nacional ha crecido desde 2020, las operaciones más importantes en el mercado español siguen siendo impulsadas por inversores extranjeros con abundancia de capital. Las empresas estadounidenses fueron los inversores más activos en 2021 y representaron más del 35% de las transacciones por valor durante el año.
Hay una perspectiva positiva para las transacciones de fusiones y adquisiciones a lo largo de este año; sin embargo, se mantiene una nota de precaución dado que todavía hay mucha incertidumbre en el mercado y está claro que las condiciones actuales del mercado siguen siendo difíciles para muchas empresas.
Además, concluye el informe que "dada la abundancia de capital de los jugadores y los líderes empresariales más confiados y optimistas, prevemos una recuperación constante y continua en el mercado español con jugadores locales y extranjeros cada vez más activos".