La crisis energética, la guerra rusa en Ucrania y los mercados de gas y petróleo en montaña rusa han empujado al Gobierno a buscar alternativas para abaratar aún más la factura de la luz de los más de 10 millones de hogares acogidos a la tarifa regualada o PVPC. Hace justo un año redujo la fiscalidad, con una bajada del IVA del 21% al 10% y del impuesto eléctrico del 5,5% al 0,5%. Y ahora volverá a cerrar más el círculo, con una rebaja de hasta el 5% del IVA.
"La rebaja supondrá entre 4 o 5 euros menos al mes para los hogares acogidos al PVPC, o tarifa regulada", explica a EL ESPAÑOL-Invertia Francisco Valverde, experto en energía y responsable del desarrollo del área de renovables de eficiencia energética del grupo Menta Energía.
"Si tenemos en cuenta la factura media de un hogar PVPC de junio, que fue de 102 euros, con el IVA aún más reducido se quedaría en 97,6 euros. Mucho o poco, son alrededor de 60 euros que no tengo que pagar, y eso es dinero para mi bolsillo, así que la noticia es positiva para los consumidores", añade el experto.
Y esta rebaja se aprobará en el consejo de ministros extraordinario del próximo sábado, según ha confirmado el propio presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Se prevé prorrogar dos de las medidas existentes, el impuesto eléctrico hasta fin de año para todos los consumidores con potencia contratada hasta 10 kW, y el 7% del Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE) para los generadores de electricidad.
La reducción del IVA es una reclamación largamente demandada por las asociaciones de consumidores como Facua, que incluso ha llegado a pedir que se "imponga" durante al menos seis meses un descuento mínimo del 50% en la factura eléctrica sometida a la tarifa PVPC de la inmensa mayoría de familias, excluyendo solo a las de rentas más altas.
El 'tope' del gas y los impuestos
Junto a medidas fiscales para bajar el precio de la luz, ya está en marcha lo que se conoce como 'excepción ibérica' o tope del precio del gas que participa en el mercado eléctrico. Una medida que no está teniendo el efecto esperado en el precio final de la luz, ya que ha coincidido con una ola de calor, falta de renovables y un recrudecimiento de la guerra rusa en Ucrania.
"Es difícil calcular cuánto va a costar la factura de la luz en los próximos meses, hay mucha incertidumbre en el mercado y todo dependerá de factores externos, como la crisis con Rusia", añade Valverde.
"Además, hay que contar con el nuevo impuesto que pretende poner el Gobierno a las eléctricas, porque no me cabe duda de que lo trasladarán a los precios finales, y por tanto la factura volverá a subir".
El lunes, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz propuso elevar la tasa del impuesto sobre sociedades en 10 puntos a las "grandes empresas energéticas" con el objetivo de elevar la recaudación en entre 1.500 y 2.000 millones de euros.
FNSSE y dividendos al CO2
No serán los únicos recargos con los que cuenten las grandes empresas energéticas. La próxima semana se aprobará en el Congreso, salvo sorpresas de última hora, dos nuevas tasas, una afectará más a gasistas y petroleras, y otra a eléctricas y grandes renovables.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL-Invertia, ambas propuestas legislativas han contado con la mayoría de los grupos parlamentarios en la Comisión para la Transición Ecológica del Congreso de los Diputados y se aprobarán, salvo sorpresas de última hora, el próximo 28 de junio. Es la guinda a la guerra que mantienen desde hace meses el Gobierno y las grandes eléctricas, petroleras y gasistas.
Tanto unas como otras advierten que se está interviniendo el mercado, y anuncian que esto tendrá como consecuencia un aumento de los precios finales de la energía para los consumidores.