El Gobierno prepara un paquete de medidas para paliar el impacto de la inflación en la economía española. Dicho conjunto se aprobará en el Consejo de Ministros extraordinario del próximo sábado. Para entonces, es posible que se ausente una de las medidas prometidas por el Gobierno: la subida fiscal a las empresas eléctricas, que el Ministerio de Hacienda bajara extender a más compañías del sector energético.
Así lo explican fuentes cercanas a las negociaciones, que indican que la subida fiscal todavía se está planteando y desarrollando. Se ignora cómo se va a aplicar y las empresas sobre las que se hará.
Con todo, desde Hacienda aclaran que el incremento tributario se va a hacer, seguro, sobre las eléctricas. Pero el Ministerio analiza aplicarlo también a otras empresas en el "perímetro" de Iberdrola, Endesa y Naturgy, tres de las principales compañías de producción eléctrica de nuestro país.
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En este saco entrarían otras compañías energéticas, como gasistas, petroleras e incluso renovables. Así, empresas como Acciona, Repsol y Cepsa estarían sometidas a la nueva fiscalidad. Sin embargo, la medida todavía se está desarrollando. La formulación del futuro impuesto todavía no está clara.
Poco se ha filtrado sobre su naturaleza. Puede ser una nueva figura, o una tasa. Desde los ministerios apuntan a que la posibilidad que se maneja sería un recargo en el Impuesto de Sociedades.
Cabe recordar que, a día de hoy, las empresas pagan en general un tipo del 25% del Impuesto de Sociedades que se aplica a una base imponible que se calcula a partir de la base contable. Los bancos y las empresas de hidrocarburos tienen que abonar un porcentaje mayor, un 30%.
En cualquier caso, lo que pagan las empresas de manera efectiva a la Agencia Tributaria varía según las deducciones a las que se puedan acoger. Pero esto ha cambiado tras los últimos Presupuestos Generales del Estado. Con su entrada en vigor, las empresas con una cifra de negocio a partir de los 20 millones de euros tienen que abonar un tipo efectivo mínimo del 15%.
Tipo efectivo
En el caso de las grandes eléctricas, es posible que lo que se aplique sea un tipo efectivo más elevado, pensado en exclusiva para estas compañías.
En cualquier caso, se haga lo que se haga, la medida no se activaría seguramente hasta 2023, por cuestiones relacionadas con los plazos legales y los trámites legislativos.
Ese impuesto a los beneficios de la cuenta de resultados de las eléctricas y que podría ampliarse a otras compañías energéticas, como gasistas, petroleras y renovables no será el único que tendrán que asumir las grandes eléctricas y otras compañías renovables.
La semana que viene el Congreso aprobará lo que se conoce como 'dividendos al CO2', un real decreto-ley (que ya cuenta con la luz verde de la mayoría del Congreso en Comisión) para la minoración de la 'retribución sobrevenida' de aquellas tecnologías que no son emisoras de CO2.
Afectará solamente a las centrales puestas en operación antes de 2003 (nucleares, hidráulicas y de parte de la eólicas, en total unos 8,5 GW). Se calcula como el 90% del coste del CO2 mensual de las centrales emisoras por encima de un umbral de 20,67 euros/tonelada de CO2 (precio medio en los 5 años previos a la elaboración del proyecto de ley).
El impacto de la medida se estima en 1.500 millones anuales, que se destinarán a financiar el coste de los pagos de capacidad y los cargos del sistema eléctrico (90%) a los consumidores vulnerables (10%). Al mismo tiempo, gracias a la subida de precio del CO2, en 2021 las arcas del Estado han recaudado unos 1.100 millones (a 24 euros/tn) y en 2022 podría acercarse a los 5.000 millones (85 euros/tn), según fuentes del sector eléctrico.
Para el sector eléctrico, el resultado final será un mayor coste del suministro energético y una mayor volatilidad de precios que se trasladará a los consumidores. Además, los 'dividendos al CO2' restarán competitividad a las centrales no emisoras, que podrían ser sustituidas por centrales con costes variables mayores, incrementando el coste medio del sistema.
También las petroleras y las gasistas tendrán que asumir un nuevo coste que hasta ahora solo se incluía en la factura eléctrica con la aprobación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE).
FNSSE
La medida, que se aprobará en el Congreso de los Diputados cuenta con suficiente apoyo parlamentario. Servirá para la creación de un 'fondo verde' que financiará los costes de renovables, cogeneración y residuos (RECORE) con un cambio de estructura.
La financiación se hará a través de todos los vectores energéticos. Es decir, se nutrirá de las aportaciones de los comercializadores de electricidad, carburantes, gas y consumidores directos (principalmente sector industrial). Aunque por volumen de ventas, son las petroleras las que más van a aportar al fondo.
Valoración de los mercados
"Todavía no se conocen los detalles y los plazos de esta subida de impuestos a las eléctricas, pero de aprobarse serían noticias desfavorables, ya que pone de manifiesto ciertos aspectos de incertidumbre regulatoria o intervención en el mercado que pesan sobre el sector", señalan desde Bankinter.
Las caídas en bolsa de Naturgy, Endesa, Acciona e Iberdrola están justificadas, pero en el caso de Redeia y Enagás, "no tendría sentido que se aplicase un mayor impuesto sobre estas actividades reguladas".
"A falta de conocer muchos detalles como si la figura impositiva aplicará solo a los beneficios extraordinarios obtenidos (en línea a otros países europeos) o sobre el total de beneficios, su permanencia o ámbito de aplicación, la noticia es negativa por la injerencia regulatoria pero no por el impacto cuantitativo", coinciden desde Banco Sabadell.
Y hacen los siguientes cálculos si se aplica la subida de 10 puntos sobre el Impuesto de Sociedades que ha pedido Unidas Podemos: "El total a recaudar sería de 1.456 millones de euros en Iberdrola (1,8% capitalización), 194 millones en Acciona Energía (1,7% capitalización), 1.087 millones en Endesa (5% capitalización), 641 millones en Naturgy (2,4% capitalización) y 1.350 millones en Repsol (6% capitalización), aunque este sería el peor escenario, ya que superaría lo que en prensa se indica que quiere recaudar el Gobierno (entre 1.500 y 2.000 millones de euros)".
Beneficios
En contra de lo que sostienen algunas de las formaciones del Gobierno de coalición, el beneficio de las eléctricas no va siempre ligado a su actividad en España. Así por ejemplo, Iberdrola obtuvo en 2021 un beneficio de 3.885 millones de euros, de los que a España responden sólo 337 millones de euros, lo que supone una caída del 9% respecto al ejercicio anterior.
En el caso de Naturgy, el grupo no desglosa sus beneficios por áreas geográficas. El beneficio en 2021 fue de 1.231 millones de euros. De ellos, en función de sus distintos negocios es atribuible a España; lo que significa que en nuestro país logró un resultado de 492 millones de euros.
Endesa opera fundamentalmente en España y Portugal. Logró un beneficio de 1.435 millones de euros, lo que supone un 3% más. Cepsa, por su parte, ganó 310 millones de euros en 2021 frente a un millón logrado en 2020 debido al cierre de las estaciones de servicio y la paralización de sus refinerías durante la pandemia.
Otro ejemplo es el de Repsol, que durante la pandemia perdió 758 millones de euros en nuestro país.
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