El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) ha abierto la primera convocatoria de ayudas para proyectos singulares de instalaciones de biogás, dotada con 150 millones de euros procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Esta tiene como destino aquellas actuaciones de aprovechamiento energético de residuos orgánicos que potencien la economía circular.
Esta convocatoria es una de las medidas contempladas en el PERTE de hidrógeno verde y energías renovables, que movilizará una inversión superior a los 16.300 millones para desarrollar tecnología, conocimiento, capacidades industriales y nuevos modelos de negocio en el campo de las energías limpias. Hasta el momento, se han activado 640 millones a través de nueve actuaciones, incluida esta última.
La reciente convocatoria permanecerá abierta desde el 12 de septiembre hasta el 14 de octubre de 2022 y el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) será el encargado de gestionar las ayudas, que se otorgarán en régimen de concurrencia competitiva y se instrumentarán como una subvención a percibir por el beneficiario, con carácter definitivo, una vez se verifique la ejecución del proyecto.
Entre los proyectos subvencionables, serán candidatos aquellos proyectos singulares de instalaciones de biogás de todo el territorio nacional que contribuyan a descarbonizar distintos sectores de la economía y permitan aumentar la protección medioambiental y la consecución de los objetivos fijados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) 2021-2030.
Los proyectos deberán estar finalizados antes del 31 de octubre de 2025 y tendrán que respetar el principio de no causar un daño significativo al medioambiente.
Además, se tendrán en cuenta criterios económicos y tecnológicos, pero también se valorará el impacto positivo en zonas de Transición Justa y Reto Demográfico, comunidades de energías renovables, entidades públicas o pymes, así como el impacto social y de género.
Neutralidad climática
Los gases de origen renovable forman parte de la solución para alcanzar la neutralidad climática en 2050 y contribuyen a la consecución de los objetivos de reducción de emisiones y de penetración de energías renovables propuestos para España en el año 2030.
Respecto al biogás, esta fuente de energía puede desplazar gradualmente al gas natural de origen fósil, especialmente en aplicaciones de alto consumo energético o difícilmente electrificables como el transporte pesado o la industria intensiva en uso de energía térmica. España tiene como objetivo multiplicar su producción por 3,8 hasta 2030.