El grupo energético angloholandés Shell, que registró un resultado récord en el segundo trimestre del año, ha advertido del impacto adverso en sus cuentas del periodo comprendido entre julio y septiembre de la caída de sus márgenes de refino y de la menor actividad en el negocio de intermediación de gas natural.
De este modo, la compañía espera que los resultados comerciales y de optimización del negocio integrado de gas "sean significativamente más bajos" en comparación con el segundo trimestre de 2022 como resultado de la estacionalidad y la volatilidad del mercado.
Shell ha explicado que el margen de refino indicativo ha bajado en el trimestre hasta los 15 dólares, frente a los 28 dólares del segundo trimestre de 2022. Esto supondrá un impacto negativo de entre 1.000 y 1.400 millones de dólares (1.008 y 1.411 millones de euros) en el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado respecto de los tres meses anteriores.
Asimismo, la compañía espera que el margen indicativo de productos químicos sea negativo en el trimestre, situándose en -27 dólares por tonelada, en comparación con un margen positivo de 86 dólares/tonelada en el segundo trimestre de 2022. Esto tendrá un impacto negativo de entre 300 y 600 millones de dólares (302 y 605 millones de euros) en el Ebitda ajustado de productos químicos del tercer trimestre en comparación con el segundo trimestre de 2022.
Shell se anotó un beneficio neto atribuido de 25.156 millones de dólares (25.359 millones de euros) en los seis primeros meses de 2022, multiplicando casi por tres el resultado de la primera mitad del año pasado. Además, también alcanzó un resultado récord de 18.040 millones de dólares (18.186 millones de euros) en el segundo trimestre gracias a los elevados precios del petróleo y el gas.