La luz en los hogares de tarifa regulada ha sido un 32% más barata en 2022: han ahorrado 200 euros por el tope al gas
Un estudio de la escuela de negocios Esade concluye que la 'excepción ibérica' ha conseguido contener la inflación en 0,3 puntos.
2 febrero, 2023 02:30Tras seis meses de funcionamiento del "mecanismo ibérico" en el mercado eléctrico español (y portugués), es decir, limitar el precio del gas que se utiliza para generar electricidad, se puede decir que ha tenido efectos más positivos que negativos para las familias.
Entre ellos, que la factura de la luz para la tarifa regulada (PVPC) en España ha sido, desde que se aprobó en junio de 2022, un 32% más barata de lo que sería en un mundo sin excepcionalidad ibérica.
Así lo confirma el informe 'Los efectos del tope al gas en los precios, la inflación y el consumo seis meses después' elaborado por la escuela de negocios Esade. Los datos confirman que las familias acogidas a este tipo de contrato han conseguido para todo 2022 un ahorro resultante de unos 209 euros por hogar.
Además, la inflación de 2022 habría sido 0,3 puntos más alta sin tope al gas: un 8,7%, en lugar del 8,4% observado. Parte de la mejor situación española frente a la eurozona a cierre de año puede atribuirse a esta medida, aseguran los economistas.
"El resultado es que el precio medio de la electricidad en el mercado regulado habría sido un 31,8% más alto sin esta medida", señala el documento. "Asumiendo 10 millones de hogares en tarifa regulada (cifra de enero de 2022), estaríamos ante un ahorro total de casi 2.100 millones. Si había menos, unos 9 millones (cifra de agosto) el ahorro se estimaría en 1.880 millones".
Más gas y venta a Francia
Como contrapartida, Esade destaca que "durante 2022 ha continuado el mayor consumo de gas para la generación eléctrica en centrales de ciclo combinado". Eso supone que hay un mayor incentivo para usar esta fuente energética, "con el consiguiente conflicto entre el objetivo de ahorro en la factura de los hogares y el de ahorro general en el consumo de gas para la economía española y europea".
No obstante, parece que el uso diario de gas para ciclo combinado se ha acercado algo más (sin llegar a igualarse) al que habría cabido esperar sin tope al gas durante los últimos meses del año. Es decir, que el mayor incremento se localizó en los meses de verano, lo cual sugiere que la imposibilidad de recurrir a fuentes como la hidroeléctrica por la sequía de esos meses pudo influir en el recurso extra al gas.
[La generación hidroeléctrica, en cuestión: los embalses en mínimos históricos al empezar el verano]
También podría criticarse que, con los precios mayoristas más bajos en la península, se dispararan las exportaciones a Francia y nuestros bolsillos pudieran subvencionar la luz a nuestros vecinos. Sin embargo, esta institución académica privada alude a que las rentas de congestión (aquellas generadas por el uso de las interconexiones y el diferencial de precios entre un país y otro) también se usan para financiar la compensación que se abona a las centrales de gas por el mecanismo ibérico.
El balance final es que, en 2022, las exportaciones a Francia más que duplicaron las de 2021 y las importaciones se redujeron a menos de la mitad. Este escenario es completamente inverso al saldo tradicional entre ambos países y, al mismo tiempo, se ha intensificado la relación de intercambio, que aumentó un 56,3%.
La ley que regula el tope al gas permite el uso excepcional de las rentas de congestión para minorar la cuantía del recargo que tienen que pagar los consumidores para financiar el mecanismo ibérico. Y el saldo de estas rentas varía en función quien vende electricidad a quién.
Con las exportaciones disparadas, la escuela de negocios asegura que "en determinados momentos se pudiera haber producido un saldo favorable hacia el sistema español que pudiera haber contribuido a reducir el coste para los españoles". Por tanto, también el importe de la subvención implícita hacia los consumidores franceses.
España, la más barata
Por último, Esade también compara la evolución de los precios mayoristas diarios de los mercados europeos con el ibérico una vez puesta en marcha la 'excepción ibérica'. Y coincide con otros expertos en asegurar que España ha pagado hasta 4 veces menos por la luz que Francia, Reino Unido o Alemania, especialmente con la llegada del frío en Europa.
Por ejemplo, a primeros de diciembre, la electricidad en Alemania superaba los 545 euros/MWh, en Francia 658 euros, al igual que en Bélgica, Holanda 560 euros. Reino Unido llegó a alcanzar el primer puesto en el ránking con casi 900 euros.
Mientras tanto, en España estaba por debajo de los 150 euros/MWh. Una tendencia que se inició a partir de la aprobación del mecanismo ibérico.