El Gobierno español confía en que aprobará "próximamente" la propuesta sobre la nueva metodología de cálculo de la tarifa regulada de la electricidad, el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). Es a la que tienen derecho los pequeños consumidores con una potencia contratada inferior a los 10 kilovatios (kW), con el objetivo de reducir la volatilidad vivida, especialmente el año pasado, en los recibos de la luz.
En este sentido, la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen Muñoz, ha confirmado durante un desayuno informativo, organizado por Nueva Economía Fórum, que "próximamente estará aprobada" la nueva tarifa regulada de la luz.
"Estamos trabajando para tener la propuesta aprobada. Nos gustaría que estuviese aprobada en este primer semestre", ha afirmado.
De su lado, la directora general de Energía de la Comisión Europea, Ditte Juul Joergensen, ha declinado dar su opinión sobre el caso español, limitándose a subrayar la importancia de trabajar de forma muy coordinada y de contar con la mayor certeza "en cuanto a los precios y el clima inversor".
El objetivo de esta nueva metodología es la de desligar el PVPC del mercado mayorista de la electricidad ('pool'), que, al haber sido el más afectado por la escalada de los precios energéticos, ha convertido a los consumidores domésticos en los grandes damnificados de la espiral alcista.
En octubre del año pasado, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ya lanzó a información pública su propuesta de Real Decreto para reducir esa volatilidad de la tarifa regulada, dando mayor peso a las referencias a los mercados de futuros, que crecerán progresivamente hasta representar el 55% en 2025.
Así, se incorpora a la fórmula de cálculo del PVPC -contratada por los titulares de unos nueve millones de puntos de suministro, el 35% del país- una cesta de precios a medio y largo plazo para evitar las fuertes oscilaciones, sin perder las referencias de precios a corto plazo que fomentan el ahorro y el consumo eficiente.
Indexado a los precios diarios del Mercado Ibérico de la Electricidad (Mibel), el PVPC fue la opción más barata para los pequeños consumidores desde su creación en 2014. Sin embargo, esta relación directa con los precios mayoristas a corto plazo ha llevado a que sus variaciones, con acusados picos y alzas por la guerra en Ucrania en los últimos tiempos, se reflejen automáticamente en las facturas finales.
De esta manera, se reducirá progresivamente la vinculación del PVPC al mercado diario y se tendrán en cuenta los precios más estables que ofrecen los mercados a plazo del Mibel, donde se adquiere energía con antelación en distintos horizontes temporales futuros.
Para ello, la oscilación de precios -la variación entre el registro máximo y el mínimo- se reduce un tercio, pasando del 27% al 17% durante la jornada diaria, y del 23% al 16% en la media mensual durante el año completo.
Además, los precios diarios del Mibel representan el 100% de la referencia del PVPC y ahora esa proporción se irá reduciendo progresivamente, para incorporar las referencias de los mercados de futuros, de modo que éstos representen el 25% en 2023, el 40% en 2024 y el 55% en 2025.
La aprobación de la nueva PVPC es uno de los compromisos del Gobierno con la Comisión Europea cuando se recibió el visto bueno a la aplicación de la denominada 'excepción ibérica' para España y Portugal.
La propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha recibido ya el visto bueno de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), así como del Consejo de Estado.
Presidencia española
Por otro lado, la directora general de Energía de la Comisión Europea ha señalado que la próxima presidencia española del Consejo de la Unión Europea durante el segundo semestre de 2023 "desempeñará un papel clave para la seguridad europea".
En este sentido, ha destacado que España tiene un papel muy importante no solo porque va a ocupar la presidencia, sino por su papel estratégico en cuanto a inversiones, empresas, cadena de suministro y las energías renovables y su despliegue.
"Albergaréis la ultima presidencia antes de la elección al Parlamento Europeo y tenemos que finalizar los procesos legislativos en marcha sobre cómo conseguir los objetivos para 2030", ha apuntando, señalando que "quedan por delante meses muy ajetreados". "Necesitamos una presidencia a la altura", ha apostillado.