La burbuja fotovoltaica, a punto de explotar: se extiende el miedo a la avalancha de 60 GW que instalarán en dos años

"No se sabe cuándo será el pinchazo, pero hay miedo en el sector fotovoltaico a que explote la burbuja", señalan fuentes de una consultora especializada a EL ESPAÑOL-Invertia. "Todavía no se puede hablar de burbuja, pero si no se soluciona este problema, la habrá a finales de 2024", asegura otro experto del sector consultado por este diario.

Nadie quiere retratarse y advertir de que estamos ante a una bola de nieve que cada vez se hace más grande. "Y el problema no sólo se da en España; en toda Europa la instalación de fotovoltaica está alcanzando niveles récord, y haciendo caer los precios del mercado en las horas solares de manera exponencial", inciden las fuentes.

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"La clave está en los bancos", continúan desde una firma especializada en asesoramiento legal y fiscal para empresas energéticas.

"Si un cliente busca financiación para construir una planta, puede constatar que se han endurecido las condiciones, al margen de haber subido los tipos de interés, y que ha bajado el valor de las transacciones, pese a que todavía hay activos que siguen teniendo mucho valor", explican.

Sin embargo, no todas las entidades financieras están ya dándose cuenta de la crisis que se avecina. "Los fondos de deuda siguen concediendo préstamos al calor de las políticas renovables, financiando con préstamos biotech y con la opción a refinanciarse en el corto plazo".

La opinión es unánime entre los expertos consultados por este diario. "Hay muchos frentes, mucho movimiento, pero cada vez asusta más materializar estos movimientos", señalan unos. "No va a haber financiación merchant para todos, y menos para los 60 GW que esperan su turno en la puerta", dicen otros.

Exceso de producción

El incremento exponencial de la fotovoltaica en España ya se está notando no solo en los precios, sino en las horas de su máximo rendimiento. Y no solo ocurre en nuestro país, sino también en Europa y en otros países del mundo.

De hecho, según el último informe de la AIE (Agencia Internacional de la Energía), España, junto con Alemania e Irlanda, verán cómo su cuota anual de energía eólica y solar fotovoltaica superará el 40% en 2024, lo que exigirá una gestión eficaz de la red para contener el aumento de los índices de restricciones.

El dato más apabullante es el aumento de la capacidad renovable mundial, que según el informe de la AIE se disparará en 107 gigavatios (GW), el mayor incremento absoluto de la historia, hasta superar los 440 GW en 2023. Esto equivale a más de toda la capacidad instalada de Alemania y España juntas.

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"La inercia de instalación de más capacidad fotovoltaica va a seguir, los fondos han comprado muchos proyectos y se han comprometido a llevarlos a cabo".

"Pero el mercado no está preparado para retribuir tanta capacidad que está esperando, pero por una razón muy lógica: no podemos consumir algo y pagar por ello menos de lo que cuesta", explica el experto en fotovoltaica. 

Entonces, ¿qué se puede hacer para evitar el pinchazo? "Cuando hay tanta producción hay tres opciones, o consumirla, o perderla o almacenarla", añade por su parte el experto en asuntos legales.

"La última opción, el almacenamiento, sería lo ideal, para evitar la congestión, pero el problema de esta tecnología es que aún no es bancable, no es una opción de presente sino de futuro, y el exceso de capacidad solar lo tenemos a la vuelta de la esquina", recalca.

Frenazo del autoconsumo

Y de las instalaciones de fotovoltaica a los paneles solares para autoconsumo. En 2022, creció un 108% respecto al año anterior en España, superando los 2.500 MW de nueva potencia de energía solar instalada, según UNEF. La mayoría de esta nueva potencia se instaló en el sector industrial (47%), seguido del sector residencial (32%) y el comercial (20%). El 1% restante es autoconsumo aislado.

Con esto, España acumula ya 5.249 MW de potencia instalada para el autoconsumo, repartida por más de 200.500 instalaciones residenciales.

Pero en este sector también se está notando el frenazo respecto al año 2022. "El hecho de que caigan los precios del mercado, reduce la ansiedad o la amenaza que hubo años anteriores por la alta volatilidad y los altos precios de la electricidad", continúa el experto.

Una opinión que se ha podido oír en los participantes en la III Cumbre de Autoconsumo y Comunidades Energéticas celebrada en Madrid y organizada por UNEF. Según Jaime Goyanes, Business Development Director Self Consumption de Eranovum: "Veo complejo superar los 2,3 GW pero es que la situación no es la misma, no hay esa urgencia por bajar la factura. Desde el sector eso tampoco es lo ideal".

También Emilio de Andrés Bárcena, Co-CEO & Chief Operational Officer de E4E, ha dicho que ven que "hay una ralentización en la toma de decisiones". "No sabemos si por el efecto económico, el efecto elecciones o el efecto financiero", ha agregado.

Y María Colom, Head of Decentralized PV de Engie, ha puntualizado que "sí que hay una ralentización de proyectos, sobre todo en la toma de decisiones que se va dilatando y que ponen en peligro que finalmente se lleguen a hacer".