Marruecos tiene un plan para impulsar la economía nacional, el proyecto de Inversión Verde de la Oficina Jerifiana de Fosfatos (OCP por sus siglas en francés), según adelantó el rey Mohamed VI en un discurso pronunciado este pasado sábado con motivo del 24º aniversario de su subida al trono.
El proyecto de inversión verde es una iniciativa del propio monarca alauita que cubre el período de 2023 a 2027 en materia de transición energética y desarrollo de energías renovables con una inversión de 130.000 millones de dírhams (12.160 millones de euros al tipo de cambio actual) y que se llevará a cabo en su mayor medida en el Sáhara Occidental.
Como ya adelantó EL ESPAÑOL, existen muchas plantas fotovoltaicas en el Sáhara Occidental en manos de empresas europeas (Siemens Gamesa, Enel o ENGIE) o internacionales (General Electric o ACWA Power) con el consentimiento de Marruecos, según ha documentado la ONG Western Sáhara Resource Watch.
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La empresa nacional de fosfatos monopoliza la producción y comercialización de este mineral en el país y es una de las líderes mundiales del sector. En la última década ha triplicado su capacidad de producción de fertilizantes y ha aumentado su volumen de negocio con la subida de precios mundial a partir de la guerra en Ucrania tras la invasión rusa.
El país vecino está acelerando la marcha del sector de las energías renovables en las denominadas "provincias del sur", territorio del Sáhara Occidental. La estrategia es ofrecer terrenos, planes de desarrollo y oportunidades de inversión a empresas internacionales en el Sáhara Occidental, a cambio de que reconozcan su soberanía sobre el territorio.
Hidrógeno verde
"Hoy, con la aparición de indicios de remisión gradual de la presión inflacionaria, a escala mundial, nos hallamos ante la acuciante necesidad de obrar con seriedad, infundiendo confianza y aprovechando las nuevas oportunidades a fin de potenciar la resiliencia y la recuperación de la economía nacional", afirmó el monarca alauita.
En este contexto, el soberano presidió una reunión del ejecutivo para elaborar el proyecto de 'Oferta de Marruecos para el hidrógeno verde'. "Invitamos al gobierno a su pronta implementación, con la calidad requerida y del modo que garantice la valorización de las potencialidades que ofrece nuestro país, respondiendo a los proyectos de los inversores mundiales en este prometedor ámbito", señaló en su alocución.
"Su Majestad nos dirige a acelerar el paso para explotar el momento actual, así como nuestra ventaja inicial, para convertirnos en un actor principal en el sector de las energías renovables", aseguró Badr Ikken, presidente de la Comisión de Transición Energética y Descarbonización de la Confederación de Empresas de Marruecos (CGEM) al digital marroquí Le360.
Los expertos del sector hablan de una "hoja de ruta" para pasar de importar energía gris a energía verde gracias al impulso del hidrógeno verde.
Exportar energía
De esta manera, el rey valida este plan y da al pistoletazo de salida para que las autoridades lo ejecuten con rapidez. El objetivo no solo es cubrir las necesidades del consumo nacional, si no también exportar esta energía limpia a países socios.
Al hablar de inversores extranjeros, empresas de Reino Unido, Alemania e Israel ya han mostrado su interés en instalarse para explotar las energías renovables. Precisamente, el grupo británico Oblin Group tiene un megaproyecto industrial de 100.000 millones de dólares (90.790 millones de euros al tipo de cambio actual), a través de OblinGreen, particularmente en el campo de las energías renovables. Esta cantidad equivale al 75% del PIB de Marruecos.
El pasado mes de julio, una delegación de empresarios británicos, entre ellos Brannan Tampest, director general de este grupo británico, visitaron Dajla, ciudad del Sáhara Occidental. De tal manera, que explotarán el sol y el viento para crear moléculas verdes al mejor costo con una plantilla del 75% de trabajadores locales.
La empresa fabricará paneles solares y palas de aerogeneradores, además de baterías para la industria automovilística marroquí. Igualmente, utilizará energías renovables, hidrógeno verde y gas, para una fábrica de vidrio verde. También apoyará la industria automotriz ecológica marroquí.
Por supuesto, para esos intercambios comerciales resulta imprescindible el puerto Dajla Atlántico que se construye. OblinGreen comenzará la primera fase del proyecto con el lanzamiento de la 'Oferta de Marruecos sobre hidrógeno verde' que anunció Mohamed VI este sábado.
Por su parte, el gigante estadounidense CWP Global, uno de los líderes mundiales en el desarrollo de proyectos de energías renovables, y la empresa alemana Hydrogenious LOHC Technologies, pionera en portadores de hidrógeno orgánico líquido (LOHC), realizarán un estudio de viabilidad conjunto que explorará una cadena de transporte de 500 toneladas de hidrógeno verde al día desde Marruecos hasta Europa.
El rey de Marruecos, Mohamed VI.
El director general de CWP, Mark Crandall, visitó Marruecos a finales de diciembre de 2022 para reunirse con su equipo local, que lleva realizando investigaciones técnicas desde 2019 sobre los recursos solar y eólico necesarios para la producción de H2.
"Marruecos es uno de los pocos países con mayor potencial para la producción y exportación de moléculas verdes. Según nuestras estimaciones, podría captar entre el 5 y el 10% del mercado mundial de hidrógeno verde. Nuestras instalaciones en Marruecos serán proyectos a gran escala, particularmente en las provincias del sur (Sáhara Occidental)", aseguró Crandall.
Marruecos fue el primer país que firmó un acuerdo con Alemania para la producción de hidrógeno verde justo después de la presentación de la estrategia nacional alemana sobre el hidrógeno en 2020. El banco de desarrollo alemán KfW financiará la construcción de una planta de producción de hidrógeno verde por un importe de 300 millones de euros. Marruecos se convertirá así en el principal productor de hidrógeno verde en África para 2025.
El país magrebí ya obtiene el 20% de su energía de fuentes renovables como la solar, la eólica y la hidráulica. No obstante, tiene como objetivo aumentar la participación de las energías renovables en su consumo de electricidad al 52% para 2030, e incluso hasta el 86%.