Meloni y Eni impulsan un plan para convertir a Italia en la puerta de entrada de gas entre Europa y África

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, anunció el lunes un plan de inversiones de 5.500 millones de euros en África. El bautizado como Plan Mattei se enmarca en las iniciativas de Italia para frenar la inmigración africana a través del impulso de la educación, la agricultura y el sector energético.

Aunque la "gestión de la migración" es una cuestión clave dentro del plan, Italia tiene un interés especial en cuidar lazos con proveedores estratégicos de gas norteafricanos, como Argelia o Libia. ¿El motivo? El papel decisivo que desempeña en la importación de energía en Europa.

[Italia estudia vender hasta el 4% de Eni por 2.000 millones como parte de su plan de privatizaciones.]

"El interés de Italia es ayudar a las naciones interesadas en producir suficiente energía para sus necesidades y a exportar el excedente a Europa, combinando dos necesidades: la africana de explotar esta producción y generar riqueza y la europea de garantizar nuevas rutas de suministro de energía", explicó el lunes la líder ultraderechista en la inauguración de la cumbre África-Italia.

Precisamente, el nombre de este plan hace honor a Enrico Mattei, fundador de Eni. El Plan Mattei tiene la meta de eliminar por completo la dependencia del gas ruso en un plazo de dos años y convertir a Italia en un hub energético entre el norte de África y Europa.

A través de la construcción de nuevos gasoductos, Italia aspira a convertirse en exportador de gas natural e hidrógeno hacia Alemania y Austria, consolidándose como el enlace estratégico entre el norte de África y los países del centro y norte de Europa.

Cerca de 3.000 millones del plan de inversiones anunciado por Meloni saldrán del Fondo Italiano para el Clima y 2.500 millones del Fondo para la Cooperación al Desarrollo.

Estrategia de Eni

Eni firmó el año pasado acuerdo histórico con el grupo libio Noc para la producción de gas en el país. Esta alianza permite iniciar el desarrollo de dos campos de gas en Libia, con una inversión estimada de 8.000 millones de dólares (7.400 millones de euros). El objetivo es producir 750 millones de pies cúbicos de gas al día a partir de 2026.

La compañía estatal también anunció el año pasado que invertirá 7.700 millones de dólares (unos 7.100 millones de euros) en nuevas inversiones en Egipto durante los próximos cuatro años. Su intención es explotar los recursos del país en el sector energético y potenciar los acuerdos alcanzados en este sentido en los últimos años.

A principios de 2023, cerró un acuerdo con Snam para adquirir el control del gasoducto Transmed, el cual facilita el transporte de gas desde Argelia y Túnez hacia Italia. Asimismo, Eni ha iniciado la implementación de diversos "centros agrícolas" en varios países africanos, cuya finalidad será el cultivo de semillas destinadas a la producción de biocombustibles.