La petrolera estadounidense ExxonMobil registró en el conjunto de 2023 unas ganancias netos por importe atribuido de 36.010 millones de dólares (33.255 millones de euros). Esto supone un retroceso del 35,4% respecto del resultado récord contabilizado por la empresa en 2022 y el segundo mayor beneficio anotado por la multinacional desde 2012.
Entre octubre y diciembre, el resultado de la mayor petrolera estadounidense sufrió una caída anual del 40%, hasta 7.630 millones de dólares (7.046 millones de euros), después de asumir impactos desfavorables por valor de 2.300 millones de dólares (2.124 millones de euros). Estaban relacionados principalmente con obstáculos regulatorios en California, que fueron parcialmente compensados por impuestos favorables y desinversiones.
De su lado, la cifra de negocio de ExxonMobil en el conjunto del ejercicio alcanzó los 344.582 millones de dólares (318.224 millones de euros), un 16,7% menos que en 2022. Incluye un retroceso del 11,6% en el cuarto trimestre, cuando facturó 84.344 millones de dólares (77.892 millones de euros).
Los costes y otras deducciones contabilizados por la empresa en 2023 ascendieron a 291.799 millones de dólares (269.478 millones de euros), un 13% por debajo de la cifra de 2022, con un recorte del 13,4% en los gastos de producción y manufactura, hasta 36.885 millones de dólares (34.063 millones de euros).
"Estos resultados demuestran las mejoras fundamentales que hemos realizado en nuestro negocio", destacó Darren Woods, presidente y consejero delegado de ExxonMobil.
El pasado mes de octubre, ExxonMobil alcanzó un acuerdo para la adquisición de Pioneer Natural Resources a cambio de 59.500 millones de dólares (54.948 millones de euros) en acciones, en lo que supone la mayor compra de la compañía desde la fusión en 1999 entre Exxon y Mobil. Se espera que la transacción concluya en el primer semestre de 2024.