Iberdrola, a través de su filial ScottishPower, ha lanzado una hoja de ruta para descarbonizar su negocio de redes eléctricas en Reino Unido para 2035. La compañía, que acaba de sacar una licitación récord de unos 6.300 millones de euros para mejorar las líneas eléctricas, se ha marcado objetivos específicos de consumo, recorte de las pérdidas de la red, sustitución de la flota de vehículos, reciclaje de residuos y eliminación de productos químicos, entre otros.
El plan de la firma presidida por Ignacio Galán se divide en cinco líneas de actuación: acción climática, acción por la naturaleza, economía circular, sostenibilidad de la cadena de suministro y sociedad. Su objetivo final es convertirse en una empresa con cero emisiones netas en 2035 y cero residuos para 2040.
En lo que a acción climática se refiere, ScottishPower Energy Networks reducirá el consumo de energía en 7,2 GWh al año mediante la renovación de sus edificios en el año 2028. Además, pondrá fin a la instalación de nuevos activos de hexafluoruro de azufre (un aislante eléctrico altamente contaminante) cuando existan alternativas rentables y técnicamente viables.
Para 2030, reducirá el 80% de su huella de carbono, el 100% de su flota de vehículos será libre de emisiones y utilizará un 50% de acero de bajas emisiones.
Entre las medidas de acción por la naturaleza, Iberdrola se ha marcado el compromiso de ejecutar en 2024 proyectos piloto para la mejora de la biodiversidad y obtener créditos de carbono que permitan compensar las emisiones de CO2. En 2025, eliminará de sus redes productos químicos PCB (bifenilos policlorados).
Para 2026, llevará a cabo 20 proyectos comunitarios de biodiversidad en terrenos no operativos. En 2028, habrá mejorado un 10% la biodiversidad en 25 hectáreas de su red de distribución y no tendrá ninguna pérdida neta de biodiversidad en sus actividades.
Entre sus acciones, también recoge la aplicación de planes de prevención de la contaminación en todos los proyectos iguales o superiores a 132 kV y el establecimiento de medidas de contención de petróleo en subestaciones de aquí a 2028.
Circularidad y suministro
Iberdrola se ha propuesto objetivos de colaboración activa con comunidades para mejorar la circularidad de materiales prioritarios, como áridos, hormigón y acero. Este 2024 entregará un proyecto de innovación para subestaciones sostenibles e implementará un mecanismo interno de intercambio de recursos. Para 2030, el 100% de los desperdicios generados por la compañía serán reciclados.
El 80% de sus proveedores cumplirán estándares medioambientales mejorados para 2028. Además, la multinacional busca colaborar con otros operadores de infraestructura en el desarrollo de una cadena de suministro "coherente" con métricas ambientales, ofrecer programas de apoyo a pymes o desarrollar herramientas digitales para la mejora de datos.
Iberdrola liderará la creación de un registro de vulnerabilidad único que vincule a múltiples organizaciones, al tiempo que mejora el soporte de datos para estos clientes. En 2028, brindará servicios de soporte directo a más de 100.000 clientes vulnerables.