El concurso consta de siete lotes que permitirán a las empresas seleccionadas  comercializar electricidad verde, dar suministro a los puntos de recarga de vehículos eléctricos de los ayuntamientos, así como compensar las entidades locales destinatarias por los excedentes de autoconsumo producidos.

Todos los lotes tendrán una duración inicial de dos años, prorrogable a un máximo de cuatro años. En este sentido, podrán ser elegidas un mínimo de dos y un máximo de 10 empresas por cada unidad de licitación.

[La cercanía del cierre nuclear y la falta de inversión verde amenazan el suministro eléctrico en Cataluña.]

El valor máximo estimado del conjunto de los contratos previstos durante la duración total del acuerdo marco, incluidas las prórrogas, y atendiendo a estas consideraciones se estima en una cantidad de 784 millones de euros (IVA excluido).

Sin embargo, podrá incrementar hasta un máximo del 20% del precio inicial, así como, también, hasta un máximo del 10% adicional, al tratarse de un contrato de precios unitarios, siendo el valor total del contrato de más de 1.019 millones de euros (IVA excluido).

Aunque no es necesario aprobar un presupuesto base de licitación (correspondiente a la cuantía estimada de los contratos basados en tramitar durante el periodo de ejecución inicial), este se cifra en la cantidad de 474 millones (IVA incluido).

La gestión de competencias como la iluminación pública o los equipamientos municipales que brindan servicios de educación, servicios sociales, deportes o mantenimiento del espacio público generan una demanda intensiva de electricidad.

Este Acuerdo marco permite la contratación centralizada del suministro de electricidad para los ayuntamientos, de forma que puedan obtener beneficios a partir de mejores condiciones económicas, gracias a las economías de escala correspondientes.

La energía que se suministre en los contratos basados de este Acuerdo marco debe ser 100% proveniente de fuentes renovables, con los correspondientes certificados de garantía de origen renovable.

Renovables en Cataluña

Esta licitación supone un paso importante en el compromiso de Cataluña con la descarbonización. La comunidad autónoma arrastra un significativo retraso en el despliegue de energías renovables con respecto al resto de España.

A pesar de que en el último año la Generalitat ha puesto un mayor esfuerzo en la tramitación de nuevos parques solares y eólicos en la región, lo cierto es que desde 2015 únicamente se han puesto en operación 38 megavatios (MW) de energía fotovoltaica y 107 MW de eólica.

Adicionalmente, el atasco renovable se topa con la cada vez mayor presión que supone el calendario de cierre nuclear. Y es que las centrales Ascó I, Ascó II y Vandellós II, localizadas en la provincia de Tarragona, produjeron en 2023 el 59% de la electricidad de Cataluña.