El sector energético ha advertido de que el desarrollo de las renovables en España solamente será un éxito si se consigue "traer industria" que avive la demanda y si se avanza en el desarrollo de las infraestructuras de redes.
En su participación en el evento 'Global Trends 2024' organizado por Europa Press y la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, el consejero delegado de Acciona Energía, Rafael Mateo, señaló que el reto del sector está en "traer demanda".
Se ha configurado "un nuevo trilema" que pasa por hacer funcionar "las tres patas necesarias para la transición energética: la generación, la demanda y la infraestructura de transporte".
"Cualquier error en el crecimiento de estas tres patas desequilibra el sistema y hace que la oferta no invierta o la demanda no llegue porque hay imperfecciones en el sistema", dijo.
En este mismo sentido, el director general de Redes de Naturgy, Pedro Larrea, subrayó que "si la montaña no va a Mahoma, Mahoma tendrá que venir a la montaña", por lo que el objetivo debe ser que "la industria venga a España".
"No pensemos en España como un productor de energía para el resto del mundo, pensemos en España como un productor de energía para la industria que se va a instalar en España", añadió al respecto.
Mientras, el director general de Generación Baja en Carbono de Repsol, Joao Costeira, destacó, eso sí, que "descarbonización no puede ser desindustrialización" y consideró que es "fundamental" atraer inversión donde se incorpore esa energía barata que es capaz de producir España.
Biocombustibles y biogases
A este respecto, apuntó que si se quiere aprovechar esa ventaja competitiva que dan las renovables, será "importante" tener políticas activas de apoyo a la industria.
Además, estimó que, a pesar de que la electricidad resolverá muchos problemas, no será la solución a "todo", por lo que defendió la necesidad de contar con todos los actores posibles, incluidos los biocombustibles, para "gestionar la transición".
"Es una inversión que estamos haciendo, que seguimos haciendo, pero que está muy pendiente de la regulación", aseguró el directivo de Repsol.
"Y digamos que esa ventaja que tenemos se puede multiplicar si reconocemos lo que de alguna forma hoy en Europa se empieza a reconocer, después de años en que esto no se podía hablar, que los combustibles sintéticos renovables tienen que ser una parte de la solución".
En la misma línea, Larrea defendió la necesidad de contar en la transición energética con otras energías renovables que "también hay que fomentar", como los gases renovables, especialmente el biometano.
"Yo creo que cuando vemos el reto enorme que tenemos en España y, en general, en el mundo para alcanzar los objetivos, ya sean los objetivos de 2030 o los de 2050 o cualquier horizonte que creamos, yo creo que lo primero que todos nos tenemos que poner de acuerdo es que todos somos necesarios", afirmó.
En el caso concreto de las redes eléctricas, Larrea recordó que mientras que la propia planificación del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) contempla unas inversiones en este apartado de unos 53.000 millones de euros, actualmente la ley limita la inversión en ellas a la mitad.