Para liderar la industria del hidrógeno verde no solo es necesario contar con fuentes renovables, también con electrolizadores que produzcan la electrolisis. Y España podría convertirse en un "campeón" de la fabricación de este componente esencial para este nuevo vector energético.
Y entre esos electrolizadores está el proyecto EMMA (Electrodos Mejorados Matteco-Ariema), que ha resultado adjudicatario de 1,1 millones de euros de subvención del PERTE de Energías Renovables, Hidrógeno Renovable y Almacenamiento (ERHA) del Ministerio de Industria.
El proyecto es fruto de Matteco, compañía de tecnología de materiales dedicada a nuevas soluciones para descarbonizar la economía, y Ariema Enerxía, fabricante líder en España. Matteco implantará sus componentes en esta nueva generación de electrolizadores de tecnología alcalina que producirán hidrógeno verde de forma más eficiente y barata.
Las ayudas se han conseguido dentro de la línea 4 de incentivos para impulsar soluciones avanzadas y tecnologías habilitadoras clave en la producción de hidrógeno renovable mediante la electrólisis del agua, fase crucial en la cadena de valor.
El presupuesto total que movilizará el proyecto, incluyendo fondos propios de los socios, será de 1,4 millones de euros, es decir, alrededor del 80% del total del coste del proyecto serán ayudas europeas.
El trabajo conjunto se centrará en desarrollar e incorporar los componentes de alto rendimiento de Matteco, líder en catalizadores y electrodos para la electrólisis alcalina y AEM, en una nueva generación de electrolizadores alcalinos más duraderos y económicos que produzcan hidrógeno verde a un coste competitivo.
"Nuestra tecnología aporta una tecnología que optimiza el proceso, lo hace más eficiente y por eso, compite en costes", explican fuentes de la compañía a EL ESPAÑOL-Invertia. "Pero estamos trabajando con los fabricantes de electrolizadores, porque nosotros queremos ser como el Intel del los ordenadores, ser capaces de ofrecer nuestro sistema para mejorar el funcionamiento de los electrolizadores".
Eficiente y competitivo
La colaboración con Ariema permitirá estudiar y consolidar las capacidades de los nuevos desarrollos de electrodos durante un periodo de tres años, tanto en tamaños de celda intermedios (25 cm de diámetro) como en los tamaños finales que demanda la industria verde (1m de diámetro).
La reducción de los costes asociados a la producción de hidrógeno verde es la gran palanca para que este vector energético se despliegue en sectores difíciles de electrificar como industrias pesadas, transporte de larga distancia y almacenamiento de excedentes de energía.
Esta implantación también permitirá convertir de manera más eficiente el excedente de energía generada durante periodos de alta producción de hidrógeno, ayudando a estabilizar la red eléctrica y a garantizar un suministro constante de energía renovable.
Iker Marcaide, cofundador y CEO de Matteco, ha señalado que "el trabajo con Ariema, fabricante de referencia, revela que la nanotecnología de Matteco está acelerando la llegada de una nueva generación de electrolizadores alcalinos, en los que nuestros componentes son clave para su rendimiento y eficiencia".
"Este nuevo paso adelante refuerza el posicionamiento de la compañía en vísperas de la apertura en Valencia de nuestra fábrica a escala gigavatio”.
Rafael Luque, consejero delegado de Ariema, por su parte, afirma que "tenemos grandes esperanzas en la tecnología de Matteco, socio de confianza, que nos permitirá avanzar en el objetivo de ofrecer electrolizadores alcalinos más eficientes a escalas cada vez mayores".
"Se consolida la posición de Ariema como un referente en el campo de la electrolisis alcalina, donde Ariema es la primera empresa española con tecnología propia".
El proyecto EMMA está alineado con los objetivos de la Estrategia del Hidrógeno de la Unión Europea para alcanzar la neutralidad climática en 2050, que pretende conseguir hasta 40 GW de electrolizadores de hidrógeno verde renovable para el año 2030. Asimismo, avanza en los retos definidos por el Departamento de Energía de los Estados Unidos (DOE) para la electrólisis alcalina en 2026.