El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que está considerando medidas para restringir las exportaciones de petróleo de Irán en medio de crecientes preocupaciones sobre la promesa de Teherán de vengarse de Israel por el asesinato de un importante líder de Hamas.

A pesar del endurecimiento de las sanciones a la economía de la República Islámica en los últimos años, las exportaciones de crudo del país han aumentado de forma constante. Según datos de la firma de análisis Kpler, sus ventas de petróleo aumentaron un 30% solo en el último trimestre, lo que elevó sus envíos de combustibles fósiles a un máximo de cinco años.

Hay nuevos esfuerzos sobre la mesa para reducir los flujos de efectivo de Teherán y mientras Irán continúa aumentando las tensiones en la región, en EEUU trabajarán con sus socios para presionar aún más a Irán y reducir sus exportaciones de petróleo, según adelanta POLITICO.

A principios de este mes, Reuters informó que Irán había estado enviando cargamentos de combustible a un número cada vez mayor de nuevos clientes, incluidos aquellos con los que no había hecho negocios anteriormente, como Omán y Bangladesh. El conflicto en Oriente Medio ha hecho subir los precios del petróleo, ya que los comerciantes temen que una guerra cada vez más extensa pueda afectar a los suministros en el futuro.

La Casa Blanca ha recibido llamadas tanto de republicanos como de demócratas en el Congreso para que refuerce la aplicación de las sanciones contra Irán, en momentos en que las hostilidades estallan a raíz de la ofensiva de Israel en Gaza.

Sin embargo, la administración del presidente Joe Biden se ha enfrentado a un difícil acto de equilibrio para mantener la presión sobre Teherán y, al mismo tiempo, garantizar que los precios de la gasolina no se disparen antes de las elecciones de noviembre.

Las expectativas de que Irán lance una nueva oleada de ataques contra Israel han aumentado después de que Ismail Haniyeh, el jefe político del grupo militante palestino Hamás, muriera en una explosión durante una visita a Teherán hace dos semanas. Irán ha acusado a Israel de orquestar el asesinato y ha prometido una “respuesta dura y dolorosa”.

El lunes, el Reino Unido, Francia y Alemania publicaron una advertencia conjunta en la que advertían a Irán de que no siguiera desestabilizando la situación. Teherán y sus aliados, dijeron, “serán responsables de las acciones que pongan en peligro esta oportunidad de paz y estabilidad”.

En abril, Irán lanzó una andanada de unos 300 cohetes y drones contra Israel en respuesta a un atentado con bomba en su consulado en Damasco que mató a un alto comandante iraní.

La mayoría de los misiles fueron interceptados por el sistema de defensa aérea israelí Iron Dome, pero los líderes occidentales advirtieron que la medida acercaba a la región a una guerra total entre los dos bandos.