Por qué la trama del petróleo de Víctor de Aldama es sólo la punta del iceberg del fraude del IVA del combustible
- La prohibición, en marzo pasado, de la reventa de combustibles entre comercializadoras ha dado lugar a una nueva figura: los 'agentes comerciales'.
- Más información: Qué es y en qué consiste el fraude del IVA de los carburantes por el que ha sido detenido Víctor Aldama
El fraude del IVA en los carburantes ha estado funcionando a espaldas de la Agencia Tributaria desde hace ya casi una década. Desde que sale el combustible de una refinería, ya sea española o fuera de nuestras fronteras, hasta que llega al surtidor de una gasolinera, en el camino hay intermediarios que se han aprovechado de las lagunas legales para hacerse de oro.
Los 182 millones supuestamente defraudados por Víctor de Aldama con empresas de hidrocarburos son solo la punta del iceberg. En 2023, el agujero fiscal para las arcas del estado ha superado los 2.000 millones de euros, a lo que hay que sumar el fraude de los biocarburantes (eludir la obligación de incorporarlos a los carburantes que se venden en las estaciones de servicio), que suponen otros 1.000 millones de euros más.
El fraude ha alcanzado estas dimensiones bíblicas porque desde 2015 hasta el pasado 28 de marzo, la normativa ha permitido que floreciera un negocio intermedio -artífice de la trama del IVA- entre operadores 'al por mayor' y los distribuidores minoristas. ¿Cuál? Las comercializadoras.
Algunas veces, estas comercializadoras, que también podían ser los mismos operadores al por mayor, hacían las veces de empresas pantalla o missing traders, comprando el carburante sin pagar IVA. Después vendían el carburante con IVA a otra empresa, pero no pagaban el impuesto recaudado.
Cuando Hacienda las localizaba, estas empresas intermediarias desaparecían o cerraban sin liquidar sus obligaciones fiscales. La empresa que finalmente comercializaba el carburante podía, además, reclamar la devolución del IVA, generando pérdidas al fisco.
Villafuel SL
El requisito para ser operador al por mayor es disponer de grandes recursos propios, "que se encuentren afectos a la actividad de distribución al por mayor de productos petrolíferos y por la cantidad de, al menos, tres millones de euros", según el artículo 10 del Real Decreto 2487/1994.
Una vez acreditado el importe, se tiene que incorporar al listado de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia), donde aparecen poco más de un centenar de compañías a día de hoy habilitadas para ejercer como tal, y en el REDEF hidrocarburos, Registro de Extractores de Depósitos Fiscales.
En el epígrafe de operadores de al por mayor del Registro Mercantil (CNAE 4671) también aparecen otras sociedades mercantiles que supuestamente son operadores al por mayor, pero que no están en el listado de la CNMC.
Es el caso de Have got time SL, creada el 29 de enero de 2021 por Vanessa Durán para el comercio y la construcción. Después, el 5 de mayo del mismo año, se vendía a María Leonor Gonzalo Pano para otro objeto fiscal: el refino, comercialización, intermediación, almacenamiento y distribución de petróleos y derivados.
Esta empresa es la dueña del chalé supuestamente alquilado por el exministro Ábalos, que pagó 292.416,66 euros a la empresa MTM 180 Capital de Víctor de Aldama.
También está vinculada a esta trama el operador petrolífero Villafuel SL, propiedad de Still Growing SL, otra de las empresas creadas por Vanessa Durán, constituida el 6 de agosto de 2020.
Villafuel fue patrocinadora del Zamora CF de Víctor Aldama durante la temporada 2022-2023.
Además, el auto de prisión de Aldama dice que "en relación con Villafuel SL, la investigación ha puesto de manifiesto que se trata de una sociedad creada para lograr sustentar el título de operador, título que facultaba a la organización criminal para operar en el mercado a través de la estructura instrumental de suministradoras y poder, de esa manera, perfeccionar el fraude".
"Es necesario resaltar que, sin ese título la operativa de fraude investigada, tal y como la ejecutaron, no habría tenido lugar", continúa.
Por el momento, Villafuel sigue estando de alta en la CNMC, pero no en el REDEF. "Si la ley dice que un operador a partir del 28 de marzo de 2024 tiene que estar en ambos registros, no se entiende por qué Hacienda y la CNMC no casan sus datos. Esto evidencia el caos que hay en el sector de los operadores de al por mayor", explican fuentes del sector a este diario.
Agentes comerciales
Por último, en el epígrafe de comercialización al por mayor de combustibles aparecen empresas como Salamanca Fuel Center (en liquidación desde agosto pasado), Cashmar hidrocarburos, Yata Tarraco o Hidrocarburos Salamanca.
Como desde el 28 de marzo está prohibida la compraventa de combustible entre distribuidores minoristas, estas empresas ya no deberían poder ejercer su labor. Sin embargo, han buscado una alternativa. Se han transformado en una figura 'traslúcida' o alegal conocida como "agentes comerciales de los operadores de al por mayor", según explican a EL ESPAÑOL-Invertia fuentes del sector de las estaciones de servicio.
"Todas ellas han tenido que transformarse a partir del Real decreto-Ley 8/2023 de finales de diciembre, al prohibirse las ventas entre distribuidores al por menor en el sector de los hidrocarburos", concluyen las mismas fuentes.