Parque eólico marino (offshore)
Los fabricantes eólicos Vestas y Siemens Gamesa se apoyan en la eólica marina con pedidos récord para el próximo año
En 2024, el 26% de los PPA en Europa fueron de eólica marina, con el récord en Países Bajos de un 91% de sus contratos bilaterales de energía.
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Los grandes fabricantes europeos de aerogeneradores, como Vestas y Siemens Gamesa, han cruzado el desierto estos años de atrás. La inflación, la subida de los tipos de interés, una logística complicada, los permitting y problemas técnicos en sus productos les complicaron su negocio.
Sin embargo, ya ven la luz al final del túnel con pedidos récord en este último trimestre (incluido Nordex). Y eso es gracias a los parques en altamar. La capacidad eólica offshore de Europa actualmente es de 35 GW, pero las proyecciones de la Agencia Europea de Medio Ambiente sugieren que aumentará a 110 GW para 2030 y 320 GW para 2050.
La energética báltica Ignitis ha presentado un estudio en el que asegura que va a haber un cambio fundamental en el sector. Prevé que los futuros proyectos de energía eólica marina en Europa tendrán el doble de capacidad que los proyectos terrestres.
Y la firma de investigación de mercado Precedence Research estima que el valor del sector eólico marino europeo aumentará de unos 8.200 millones de euros en 2023 a 54.000 millones en 2034.
Según los analistas de Wood Mackenzie, la capacidad eólica marina licitada en 2024 alcanzó niveles récord, pero existe la posibilidad de que se licite más de un 30% más en 2025. Todo dependerá de lo que ocurra con las elecciones en Alemania y las subastas en Reino Unido y Dinamarca.
"Con todos los proyectos que hay encima de la mesa, si se aceleran los procesos administrativos, los fabricantes eólicos tienen mucho trabajo para los próximos años. Eso sin olvidar que hay mucho repowering, y en España, hay que desatascar los 2.700 MW de eólica terrestre parados por un juez en Galicia", señala a EL ESPAÑOL-Invertia Fran Méndez, del comité de empresa de Siemens Gamesa y miembro de CCOO.
"Europa debe decidir si apuesta por la independencia y la soberanía energética, y para eso debe apoyar el desarrollo de tecnologías que utilicen fuentes autóctonas". Y aunque "en Estados Unidos dicen que Trump está empeñado en parar su desarrollo, los estados siguen en la carrera por la eólica offshore. Por ejemplo, uno de los estados más republicanos, Texas, es uno de los más convencidos".
Récord en PPA
Una de las señales más evidentes de que la eólica marina cuenta con el apoyo de los inversores son las firmas de PPA (power purchase agreement o contratos bilaterales a largo plazo de energía) en el último año.
Según el último informe de Our New Energy (ONE), en 2024, en Europa, el 26% de los PPA correspondieron a energía eólica marina. Aunque sigue estando por detrás de la energía eólica terrestre (33%) y la fotovoltaica (41%), la eólica marina juega un papel cada vez mayor en el mercado europeo de PPA.
En estados como Países Bajos, esta tecnología ya supuso el 91% del volumen total de PPA firmados en 2024. Los principales mercados de transacciones de energía eólica marina en 2024 incluyen al Reino Unido, Países Bajos y Alemania.
No obstante, hay dudas respecto a si estos tres países lograrán cumplir sus objetivos de despliegue de energía eólica marina. Para abordar este reto, la expansión del mercado de la energía eólica marina debe crecer al ritmo de la demanda, de cara a seguir siendo financieramente atractiva.
Centros de datos, la alternativa
Los centros de datos representan el 35% del mercado de PPA de energía eólica marina en Europa. De hecho, los mayores compradores de energía eólica marina a través de PPAs en 2024 han sido empresas tecnológicas, entre las que destacan Amazon y Google.
Actualmente se buscan compradores para adquirir el equivalente a 2,1 GW de energía renovable en 11 países europeos, según el informe de ONE. Pero en el caso de la energía offshore, la francesa Engie, la angloholandesa Shell, la alemana RWE y la española Iberdrola lideran el mercado, con 1.510 MW, 1.327 MW, 1.000 MW y 700 MW respectivamente.
Panorama de los PPAs negociados en los principales mercados eólicos marinos europeos en 2024
Se espera que esta tendencia se mantenga en los próximos meses, y que los centros de datos y sectores con alta demanda energética y ciclos de negocio largos, como el acero y los productos químicos, continúen siendo los principales compradores de energía eólica marina.
También se espera que a medida que los activos más antiguos comiencen a salir de los esquemas de subsidios, surjan más PPA con múltiples compradores, y que el proceso de subasta de los gobiernos tendrá un papel clave en la expansión y configuración del mercado de PPA.
Retos pendientes
A pesar de las perspectivas de crecimiento para este mercado, para One New Energy, aún sigue habiendo retos pendientes, que dificultan alcanzar acuerdos beneficiosos para todas las partes.
Uno de ellos, es que mientras que los desarrolladores buscan PPA a largo plazo para asegurar certeza financiera, los offtakers prefieren comprometerse con PPA más cercanos a la fecha de inicio de operaciones.
Los desarrolladores suelen optar por un pequeño número de PPA grandes, en lugar de múltiples acuerdos pequeños, lo que puede limitar el acceso a ciertos compradores.
También la fijación de precios en estos contratos es compleja para ambas partes, ya que establecer precios hasta cinco años antes de la COD (fecha de operaciones comerciales) implica riesgos significativos, por lo que es esencial considerar modelos innovadores, como el precio basado en el LCOE.
Our New Energy (ONE) está apoyando activamente este proceso de transformación del mercado desde su posición como compañía experta. Un ejemplo exitoso es el reciente PPA de eólica marina entre Copenhagen Infrastructure Partners (CIP) y Google, asesorado en exclusiva por Our New Energy (ONE). Bajo el PPA, Google comprará a CIP 250 MW de energía eólica marina para sus centros de datos en Países Bajos, con un plazo de vigencia de 15 años.
Además, este proyecto de energía eólica marina dará soporte tanto a las operaciones de Google como a varios electrolizadores para producir hidrógeno renovable.
