El proyecto urbanístico Ribera del Calderón, que ocupa el lugar donde estaban el estadio Vicente Calderón y la fábrica de la cervecera Mahou, no ha sido ajeno a la crisis derivada de la subida de las materias primas, el coste de la energía y la huelga del transporte.
Como muestra, un botón. Residencial Zaurak es el nombre del único solar que se desarrolla en régimen de cooperativa de los seis existentes. De las 196 viviendas, el 100% están vendidas desde hace tiempo. Entre otras razones, porque el precio es del orden de 500 euros más barato el metro cuadrado respecto al resto de promociones.
“Esa obra esta en fase de estructura avanzada. En algunos sitios ya ha llegado a la estructura de las plantas ocho, nueve o diez. Pero es verdad que está medio ralentizada si no cuasi parada”, afirma Juan José Perucho, socio director general del Grupo Ibosa, que es quien desarrolla la promoción.
Y la razón tiene que ver con la falta de materiales: “No hay apenas hormigón. No hay acero. Hemos estado sin transporte. Las obras han sufrido una semana de casi parálisis y ahora se va retomando. Representará un retraso de diez o quince días en la entrega de llaves. Y luego a ver cómo lidiamos con el incremento de costes con la constructora”.
Una situación que se va a repetir en el resto de los proyectos. “Nosotros esperamos entregar las primeras llaves a finales de 2023. No obstante, con la cautela de ver qué pasa con la situación actual. Ahora hay que ver cómo evolucionan todos los precios de las materias primas. La incertidumbre de que todo vuelva a desmadrase está sobre la mesa”, relata Juan José Perucho.
Menor beneficio
Con este panorama, el socio director general del Grupo Ibosa reconoce que “puede haber un ligero sobrecoste de obra” en la cooperativa. Y para los promotores indica que habrá “una ligera reducción del beneficio”.
Y es que, seguramente, alguno trasladará el incremento de precio a la vivienda. “Hay un mercado con mucha demanda y el coste te lo suben. El que sea promotor intentará mantener su beneficio subiendo precio”, vaticina Juan José Perucho.
Esta es una de las características de lo que en un principio se conoció como Operación Mahou-Calderón: su precio alto. Alrededor de 6.000 euros el metro cuadrado. “Todos considerábamos que eran precios difíciles de alcanzar sobre todo con la obra a dos años vista sin terminar”, reconoce Perucho.
Pero la demanda ha desbordado las previsiones. Eso se ha debido a que en Madrid no hay ubicaciones tan céntricas con edificios tan modernos en funcionalidad, sostenibilidad, medioambiente o consumo. Sobre todo, si se compara con lo que existe alrededor.
En conjunto, las obras de las seis manzanas que conforman Ribera del Calderón están bastante avanzadas. Y pronto el Ayuntamiento de Madrid iniciará las obras de cubrición de la M30 y la continuación de Madrid Río.
Ribera del Calderón es un proyecto que arrancó en 2019 con la demolición del estadio Vicente Calderón y de la antigua fábrica de cerveza de Mahou. Contará con más de 73.000 metros cuadrados de zonas verdes y albergará más de 1.300 viviendas de uso residencial (alrededor de la mitad en régimen de alquiler) y numerosas zonas de equipamiento público. La inversión en concepto de obra de urbanización y edificación supera los 220 millones de euros, y se generarán más de 5.000 puestos de trabajo.
El local estrella de la zona será ocupado por Carrefour. Y será así tras el acuerdo al que llegaron Mahou con Zaurak (la cooperativa gestionada por el Grupo Ibosa). Carrefour Market abrirá con 56 plazas de aparcamiento y una superficie de unos 3.000 metros cuadrados.