Las autoridades chinas han puesto bajo arresto domiciliario al presidente de la promotora inmobiliaria Evergrande, Hui Ka Yan, según han informado este miércoles fuentes con conocimiento del asunto consultadas por Bloomberg.
Así, el directivo está siendo vigilado después de haber sido ya requerido por la policía con anterioridad este mismo mes. En este sentido, la legislación del 'gigante' asiático prevé que el régimen de incomunicación y la entrega a las autoridades del pasaporte y DNI no exceda un periodo de seis meses.
No obstante, no han trascendido los motivos para tales medidas, ya que no ha sido formalmente detenido ni se le han imputado cargos.
Estas medidas se suceden al anuncio tan solo hace unos días de que Evergrande "no podía cumplir los requisitos" para la emisión de nuevos pagarés debido a que una de sus principales filiales, Hengda Real Estate, estaba siendo investigada.
La noticia sacudió las acciones de la promotora en la bolsa que se han desplomado más de un 18% este miércoles en la bolsa tras trascender el arresto domiciliario del presidente de la compañía, Hui Ka Yan.
Bancarrota en Estados Unidos
De esta forma, Evergrande ha perdido el 18,99% de su valor desde la apertura de la sesión en el índice Hang Seng de Hong Kong, cerrando la cotización en los 0,32 dólares hongkoneses (0,039 euros) por título.
Asimismo, la semana pasada se detuvo a varios de los empleados de Evergrande Wealth tan solo un mes después de declararse en bancarrota en Estados Unidos. Entonces la compañía aseguró que los arrestos "no afectarían a sus operaciones".
Según la policía de Shenzhen, en la provincia meridional de Guangdong y donde tiene su sede el grupo inmobiliario, entre los detenidos había una persona apellidada Du, lo cual podría referirse a Du Liang, director general de Evergrande Wealth.
El arresto de los trabajadores de Evergrande Wealth se produjo dos semanas después de que el grupo volviera a incumplir los pagos de sus productos de inversión. Con todo, la policía pidió a la población denunciar sospechas de fraude a través de internet, teléfono, mensajes o correo electrónico.