Bruselas

La Unión Europea amenaza con restringir el acceso de los productos médicos chinos a licitaciones si Pekín no suprime las barreras comerciales que frenan el acceso de las empresas comunitarias a los mercados de contratación pública y concesiones de China.

La Comisión de Ursula von der Leyen ha lanzado este miércoles, por iniciativa propia, una investigación contra las "medidas y prácticas" del Gobierno de Pekín que "han dificultado de forma grave y recurrente el acceso de los operadores económicos, bienes y servicios de la Unión al mercado de la contratación pública de productos sanitarios de China", según publica el Diario Oficial de la UE.

Se trata de la primera vez que Bruselas activa el Instrumento de Contratación Internacional, cuyo objetivo es forzar la apertura de los mercados de licitaciones de países extracomunitarios a las empresas europeas. El Ejecutivo comunitario ha dado este paso tras constatar que las autoridades chinas no les han ofrecido ninguna solución pese a haber planteado el problema en múltiples ocasiones.

La iniciativa de la Comisión amenaza con disparar las tensiones comerciales entre la UE y China, que en los últimos meses no han parado de escalar. El Ejecutivo comunitario ya ha lanzado otras investigaciones contra los coches eléctricos, los ferrocarriles, los paneles solares y las turbinas procedentes de China.

Además, la Comisión realizó este martes inspecciones por sorpresa en las sedes en Polonia y Países Bajos del fabricante chino de productos de seguridad Nuctech. La identidad de la compañía ha sido desvelada por el Financial Times. Bruselas cree que esta compañía ha recibido subvenciones públicas que podrían distorsionar el mercado único. La redada ha indignado a la Cámara de Comercio de China en Bruselas.

El mercado de contratación pública de productos sanitarios de China es el tercero más grande del mundo (sólo superado por Estados Unidos y la UE) y uno de los que crece más rápidamente. Bruselas denuncia que la cuota de mercado de las compañías europeas está cayendo pese a ser altamente competitivas debido a las barreras que impone Pekín.

Los países más afectados son Alemania, Francia, Países Bajos e Italia. Entre los productos sanitarios más perjudicados por las restricciones chinas se encuentran sillas de ruedas; Instrumentos y aparatos de medicina, cirugía, odontología o veterinaria; artículos y aparatos de ortopedia; o esterilizadores médicos, quirúrgicos o de laboratorio.

Entre las prácticas denunciadas por Bruselas se encuentra la estrategia 'Made in China 2025', que establece que la adquisión por parte de los hospitales de productos sanitarios de gama media y alta fabricados en el país debe alcanzar el 70% para 2025. Además, Pekín ha establecido normas más estrictas para la adquisición de productos importados que para los nacionales.

"La evaluación preliminar de la Comisión concluye que las medidas y prácticas mencionadas dificultan de forma grave y recurrente, de iure y de facto, el acceso de los operadores económicos, bienes y servicios de la Unión al mercado de la contratación pública de productos sanitarios en China", señala el diario Oficial de la UE.

La investigación lanzada este miércoles tiene un plazo de 9 meses, que puede prorrogarse 5 meses extra. Durante este periodo, la prioridad para Bruselas es encontrar una solución negociada con las autoridades chinas. Si no es posible, el Instrumento de Contratación Pública permite penalizar en los baremos a las empresas chinas que participen en licitaciones en la UE o directamente excluirlas de los mercados europeos de contratación pública.