El despliegue de militares de operaciones especiales suele ser materia clasificada y sus caras se difuminan por motivos de seguridad
Un vídeo difundido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en su cuenta personal de Twitter (@realDonaldTrump) muestra con la cara descubierta a los integrantes de un equipo de la unidad de combate de élite SEAL de la Marina estadounidense desplegado en Irak, según informa la revista estadounidense 'Newsweek', que ha analizado a fondo las imágenes y ha consultado con expertos militares en Inteligencia.
Según la cabecera, el despliegue de esta unidad militar de élite estadounidense --la misma que abatió en su mansión de Abbottabad (Pakistán) al fundador de Al Qaeda, Usama bin Laden, en mayo de 2011-- siempre se hace de forma encubierta y las caras e identidades de sus integrantes no se revelan por motivos de seguridad, ante la amenaza que podría suponer para las vidas de estos militares.
La revista estadounidense ha señalado que Trump, como comandante supremo de las Fuerzas Armadas, puede desclasificar información pero ha subrayado que generalmente no se revela públicamente el despliegue de una unidad de operaciones especiales, "especialmente si los militares" de la unidad "están desplegados". En esos casos, las autoridades suelen borrar o difuminar las caras de los integrantes de las unidades de fuerzas especiales de las fotos y los vídeos que se difunden públicamente, algo que no ha sucedido en esta ocasión.
El vídeo difundido por Trump en su perfil de Twitter no difumina las caras de los militares de las fuerzas especiales. Altos cargos de defensa y ex altos cargos del departamento han contado a 'Newsweek' que la información sobre las unidades desplegadas está casi siempre clasificada y que desvelar este extremo supone un incumplimiento en materia de seguridad operativa.
Trump visitó este miércoles por sorpresa a las tropas estadounidenses desplegadas en Irak, acompañado por la primera dama, Melania Trump. Ambos posaron con las tropas estadounidenses para fotos y vídeos durante su visita a la base aérea Al Asad en Irak.
El 'pool' de prensa que ha viajado con Trump a Irak ha contado que los detalles del viaje estuvieron sometidos a un embargo informativo hasta que el mandatario finalizara su discurso ante un grupo de unos 100 militares, en su mayoría miembros de operaciones especiales desplegados para misiones de combate en Irak y en Siria.
La información del 'pool' (el reducido equipo de periodistas autorizado a viajar con Trump y que debe facilitar la información al resto de medios acreditados) señala además que Trump durante su visita se paró a tomarse una foto con un teniente coronel de la Marina que se identificó como el capellán de uno de los equipos de los SEAL. "En ese caso, ¡hagámonos una foto!", afirmó el mandatario cuando el militar se dirigió a él.
Después de que el avión presidencial Air Force One abandonara con Trump a bordo el espacio aéreo iraquí, el presidente estadounidense difundió en su cuenta personal de Twitter un vídeo con imágenes de su visita. En el vídeo, el mandatario y la primera dama aparecen posando con los miembros del equipo SEAL, vestido con uniforme de campaña y con gafas de visión nocturna.
Malcolm Nance, un exespecialista de Inteligencia de la Marina estadounidense con experiencia en Irak, ha contado a la revista 'Newsweek' que la difusión de este vídeo supone un incumplimiento de los procedimientos tradicionales que establecen que hay que salvaguardar las identidades de los miembros de fuerzas especiales estadounidenses, particularmente cuando están desplegados en zonas de combate.
"La seguridad operativa es el aspecto más importante de los despliegues de personal. Los nombres reales, las caras, las identidades del personal implicado en operaciones especiales o actividades son generalmente mantenidos en secreto en una zona de combate", ha subrayado Nance.
"Revelarlos accidentalmente, mediante una exposición extraordinaria ante los medios incluso si se trata del comandante en jefe, supondría un boom de propaganda si cualquiera de estos militares son detenidos por un gobierno hostil o capturados por un grupo terrorista. No habría una negación de quién eres y qué haces", ha explicado el experto en Inteligencia militar.
Preguntado sobre este tema por parte de 'Newsweek', el Pentágono ha se ha remitido a las explicaciones que dé el departamento de Comunicación de la Casa Blanca.
Un alto cargo del Pentágono que ha hablado con la revista norteamericana bajo condición de anonimato ha dicho que el despliegue de fuerzas especiales, incluidos los SEAL, es un tema casi siempre catalogado como "clasificado" para proteger a los integrantes de los equipos que están "de forma encubierta o no" en conflictos en los que está implicado Estados Unidos.
"Incluso durante las exhibiciones de operaciones especiales para delegaciones del Congreso o para el presidente o el vicepresidente, los militares o tienen sus caras tapadas o sus caras se difuminan digitalmente antes de difundir las imágenes al público", ha señalado este alto cargo del Departamento de Defensa. "No recuerdo otro momento en el que las fuerzas de operaciones especiales tuvieran que posar con sus caras visibles estando de servicio en una zona de guerra", ha concluido.