MADRID, 5 (Portaltic/EP)

Movistar Riders se ha sumado a la campaña internacional 'My Game My Name', impulsada por la organización Wonder Women Tech (WWT), que denuncia el tratamiento machista en la industria de los videojuegos y que tiene por objetivo crear conciencia del problema al que se enfrentan las jugadoras de videojuegos en juegos 'online' en los que sufren toda clase de discriminación e insultos.

En una mesa redonda moderada por la jugadora y presentadora de Movistar Riders Lara Smirnova, algunos jugadores del equipo junto con otros profesionales del mundo de los deportes electrónicos, o 'eSports', han denunciado estás actitudes y han matizado que "no son un hecho aislado, sino un problema generalizado".

Esta mesa redonda, formada por los jugadores Samuel 'Sammy' Mateos y Alejandro 'Black' García, la narradora de videojuegos especializada en el League of Legends, Ainhoa 'Noa' Campos; la encargada de parte de producción audiovisual de la campaña, Laura Nogales; y el responsable de 'eSports' en España, Santiago Peydro, ha sido el escenario donde se han contado todas sus experiencias.

El machismo en el mundo de los videojuegos es un problema latente que han experimentado todas las jugadoras; comentarios como "no hace falta que vengas a aquí, quédate en la cocina" o "ya está la partida perdida porque tenemos a una chica en el equipo" siguen siendo comunes en las partidas 'online', como han denunciado todos los participantes de este evento.

Tener una compañera de equipo, incluso, llegaría a incomodar a algunos jugadores. Así los recoge una encuesta realizada en 2017 por la Entertainment and Sports Programming Network (ESPN) a jugadores de primer nivel de League of Legends (LoL) de Norteamérica sobre cómo se sentirían si tuviesen a mujeres en sus equipos. El 27% respondió que "se sentiría incómodo" e incluso "correría el riesgo de enamorarse".

"Ellas siempre tienen que demostrar el doble pero, a veces, no le dejan ni demostrarlo", ha señalado Black. Por su parte, Noa ha asegurado que durante toda su trayectoria profesional que se le ha cuestionado y se le sigue cuestionando "por ser mujer", y ha añadido que "siempre se insinúa que una mujer que ha llegado a un puesto alto ha recurrido a méritos sexuales para ello".

INTERCAMBIO DE ALIAS

Como parte de este movimiento de concienciación, Movistar ha invitado a algunos de los jugadores más conocidos en España a jugar una partida real con alias femeninos, dejando a un lado los que usan habitualmente. En ella ha participado Samuel 'Sammy' Mateos, quien ha contado que fue víctima de expresiones como "no puede ser una chica, ellas no están capacitadas para jugar tan bien como nosotros" o "no puedes ni ver el mapa mientras friegas". En este mismo experimento, Black fue expulsado a los 20 segundos de empezar la partida por "ser una chica", como él mismo ha explicado.

Adeás de los invitados a la mesa redonda, entre el público asistente, también se encontraban algunas jugadoras populares en España y protagonistas del vídeo de promoción de esta campaña. Al comentar sus experiencias, han coincidido en que todas ellas han "sufrido estas situaciones y comentarios" y han asegurado "que jamás han sido defendidas por nadie", información que la misma presentadora ha respaldado, añadiendo, en base a su experiencia que "si alguien me defendía, era otra chica".

La "impunidad y el anonimato" en el que se encuentran los usuarios responsables de estas ofensas son los "grandes motores" que respaldan este tipo de abuso, como han apuntado los participantes de la mesa redonda en varias ocasiones, y según ha explicado Laura Nogales "había que sacar a la luz estas actitudes en eSports".

Por su parte, Peydro ha puesto de manifiesto la necesidad de "construir la forma en la que la gente debería comportarse en el entorno digital" y ha señalado la obligación que tienen las empresas de "crear las oportunidades que permitan a la mujeres demostrar el talento que tienen".

La mesa redonda, organizada por Movistar, espera crear conciencia y dar visualización sobre este problema. Noa ha concluido dicho evento reclamando que "las mujeres pueden ser lo que quieran". "Nosotras no somos víctimas, podemos soportar lo que nos digan; somos fuertes y debemos confiar en nosotras".