Spotify no sería el negocio que es actualmente sin la App Store, sostiene la multinacional estadounidense

Apple ha salido al paso de las acusaciones vertidas por Spotify, que ha presentado una denuncia contra el fabricante estadounidense ante la Comisión Europea por competencia desleal, afirmando que la compañía de distribución de música en 'streaming' emplea una retórica engañosa y busca beneficiarse de las ventajas de las app gratuitas sin serlo.

"Spotify tiene todo el derecho de determinar su modelo de negocio, pero nos sentimos en la obligación de responder cuando envuelve sus motivaciones financieras en una retórica engañosa", sostiene la multinacional de Cupertino.

En este sentido, rechaza las acusaciones de bloquear el acceso de Spotify a productos y actualizaciones de Apple, añadiendo que cuando se han requerido ajustes al servicio de música en 'streaming' ha sido cuando Spotify ha tratado de eludir las mismas reglas que siguen el resto de aplicaciones.

"Spotify es libre de crear aplicaciones para competir con nuestros productos y plataformas, y esperamos que lo hagan", apunta la compañía estadounidense.

Asimismo, el dueño del iPhone y la App Store defiende que Spotify "pretende disfrutar de las ventajas de las aplicaciones gratuitas sin serlo", señalando que únicamente exige una contribución económica a aquellas aplicaciones que hacen uso del sistema de pagos seguros de Apple para comercializar bienes y servicios en las apps.

A este respecto, además, la firma dirigida por Tim Cook apunta que en su denuncia del cobro de una comisión del 30% Spotify olvida indicar que esta se reduce al 15% después del primer año de suscripción, añadiendo que la mayor parte de clientes hacen uso de la versión gratuita de Spotify, que incorpora anuncios publicitarios, por la que la compañía sueca no paga a App Store.

Apple señala que contribuye a conectar a Spotify con sus usuarios y proporciona a la compañía de 'streaming' una plataforma para descargar y actualizar su app, compartiendo con ella desarrollos de software, además de crear un sistema de pagos seguros, mientras Spotify pretende disfrutar de todas las ventajas quedándose el 100% de los ingresos.

"SPOTIFY NO SERÍA LO QUE ES SIN APPLE".

"Spotify no sería el negocio que es hoy en día sin el ecosistema de la App Store, pero ahora están aprovechando su escala para evitar contribuir al mantenimiento del ecosistema para la próxima generación de creadores de apps", concluye la estadounidense.

Este miércoles, el consejero delegado y fundador de Spotify, Daniel Ek, explicó que la denuncia ante Bruselas se debe a las reglas que aplica Apple en su tienda de aplicaciones. A juicio del ejecutivo, dichas reglas "limitan adrede las opciones y reprimen la innovación a costa de la experiencia de usuario".

En concreto, Spotify acusa a Apple de actuar como "jugador y árbitro" para poner en desventaja al resto de desarrolladores, ya que la compañía de Cupertino no solo es dueña de la App Store, la tienda de aplicaciones de los dispositivos de Apple, sino que también opera Apple Music, que es un "competidor directo" de Spotify.

Ek señaló que Apple obliga a Spotify y otros servicios digitales a pagar una comisión del 30% por cada compra realizada mediante su sistema de pagos, algo que "inflaría artificialmente" el precio de las suscripciones de Spotify por encima del de Apple Music.

En cambio, si Spotify decide no usar el sistema de pagos de Apple, la dueña del iPhone "aplica una serie de restricciones técnicas y que limitan la experiencia" de usuario. La empresa radicada en Estocolmo ha asegurado que, en ciertos casos, no pueden mandar correos electrónicos a los usuarios de su aplicación en dispositivos de Apple.

"No buscamos ningún trato especial. Simplemente queremos que se nos trate como el resto de 'apps' en la App Store, como Uber o Deliveroo, que no están sujetas a la comisión de Apple y no tienen las mismas restricciones", ha subrayado el primer ejecutivo de Spotify.

Debido a esto, la firma ha solicitado a los servicios de Competencia del Ejecutivo comunitario que todas las aplicaciones, incluidas las desarrolladas por Apple, se sometan a las "mismas reglas", así como que los consumidores tengan "libertad de opción real" en lo referido a los sistemas de pagos.