La compañía tecnológica china Xiaomi obtuvo un beneficio neto de 13.478 millones de yuanes (1.769 millones de euros) en el conjunto de 2018, frente a los 'números rojos' de 43.889 millones de yuanes (5.760 millones de euros) que registró durante el ejercicio anterior, según informó la empresa este martes.
En concreto, el fabricante de teléfonos móviles ha indicado que durante 2018 contabilizó un impacto positivo extraordinario de 12.514 millones de yuanes (1.642 millones de euros) por la conversión de todas sus acciones preferentes convertibles y redimibles en acciones ordinarias tras su salida a Bolsa. Durante el año anterior, Xiaomi registró un impacto negativo extraordinario de 54.072 millones de yuanes (7.096 millones de euros) por este mismo concepto.
La facturación neta de la compañía se situó en 174.915 millones de yunaes (22.955 millones de euros) entre enero y diciembre de 2018, un 52,6% más. Por segmentos de negocio, los ingresos procedentes de la venta de teléfonos móviles crecieron un 41,3%, hasta 113.800 millones de yuanes (14.935 millones de euros).
En segundo lugar se situó la facturación procedente de la división de productos de estilo de vida, donde se encuadran las ventas de patinetes eléctricos o robots aspiradores, que aumentaron un 86,8%, hasta 43.816 millones de yuanes (5.750 millones de euros). De su lado, los ingresos procedentes de los servicios prestados a través de Internet fueron de 15.955 millones de yuanes (2.093 millones de euros), un 61,2% más.
Con respecto a los gastos, los costes asociados a las ventas se aceleraron hasta los 152.723 millones de yuanes (20.043 millones de euros), un 53,5% más, mientras que los gastos de marketing se establecieron en 7.993 millones de yuanes (1.048 millones de euros), un 52,8% más.
De cara a 2019, la firma ha subrayado su interés en potenciar su estrategia "multimarca", ya que desde enero 'Xiaomi' y 'Redmi' operan como dos marcas diferentes en el mercado de telefonía móvil. Además, durante el presente ejercicio la compañía, lanzará al mercado más terminales con sus tres nuevas marcas: 'Black Shark', dirigida a usuarios de videojuegos, 'Meitu', dirigida a mujeres, y 'POCO', dirigida a "entusiastas" de la tecnología.
"Esta estrategia multimarca nos permite servir a diferentes grupos de usuarios de forma más efectiva y expandir todavía más nuestra base de usuarios", ha apostillado la compañía.