ALCOROCHES (GUADALAJARA), 14 (Portaltic/EP)
El Parque Natural del Alto Tajo ha recuperado 1,5 millones de árboles gracias a la aplicación de la innovación en ciencia y tecnología en los trabajos de reforestación, mediante el empleo de un dron, semillas inteligentes de especies autóctonas y la tecnología de LG.
Los trabajos de reforestación del Parque Natural del Alto Tajo se han sucedido a lo largo de varios meses, y más de un año en la investigación y desarrollo en laboratorio sobre semillas de especies autóctonas, que han permitido recuperar 1,5 millones de árboles después de que un incendio en 2012 calcinara 1.200 hectáreas y afectara a los 5.000 vecinos de la zona.
Uno de los municipios afectados fue Alcoroches (Guadalajara), precisamente donde este jueves LG Electronics España, junto con CO2 Revolution y Recombina Biotech, ha presentado la tercera y última fase del proyecto de reforestación, que se enmarca en el programa Smart Green de la compañía surcoreana. La primera fase arrancó el pasado 16 de marzo.
"Hace siete años fuimos protagonistas por algo feo, devastador y negativo" como es un incendio. Y "siete años después, estamos celebrando que esa parte que se quemó sea un proyecto de reforestación", ha expresado la alcaldesa en funciones de Alcoroches, Laura Jiménez.
CIENCIA Y TECNOLOGÍA AL SERVICIO DEL BOSQUE
Reforestar una zona quemada es un reto. Especialmente en la zona del Alto Tajo, donde en siete años no se ha regenerado nada de forma natural, como ha indicado el el cofundador de CO2 Revolution, Javier Sánchez. Aquí "el bosque no ha tenido memoria", ha lamentado.
Aunque la plantación se puede realizar de forma manual, el apoyo de la tecnología permite reforestar grandes extensiones de terreno a un coste asequible y de forma rápida. En este sentido, se ha empleado un dron, en combinación con un 'smartphone' LG G8S -renombrado como LG G8 Smart Green dada su aportación a estos trabajos-, un portátil LG Gram y semillas inteligentes de pino.
Para incrementar el éxito de germinación, en Recombina Biotech primero llevaron a cabo un análisis del suelo de la zona, que permitió seleccionar los microbios, las baterías y los hongos más beneficiosos para el suelo, que son beneficiosos también para el desarrollo de las plantas.
Este trabajo de laboratorio consigue una efectividad hasta un 80 por ciento mayor que los métodos tradicionales. Y se debe a que las semillas inteligentes se encuentran recubiertas de un polímero gelatinoso que provee los mencionados microorganismos y otros elementos, como fertilizantes, que favorecen la germinación, al tiempo que las protegen y evitan que se sequen.
Estas semillas se han plantado en el terreno con ayuda de un dron de CO2 Revolution. Este equipo está provisto de diversos sensores y un 'smartphone' LG G8 Smart Green, con el que se realizan tareas de reconocimiento del terreno, y de unos dispensadores, de diseño propio y fabricados con impresoras 3D, cuyo depósito tiene capacidad para 9.000 semillas. Esto supone que en un vuelo de diez minutos, el dron puede dispersar 9.000 semillas sobre el terreno, muchas más de las que podría plantar el ser humano a mano en el mismo tiempo.
Los dispensadores pueden distribuir las semilla en dos modos distintos: uno geolocalizado, que suelta la semilla en un punto concreto y que permite el posterior seguimiento del crecimiento de la planta, con lo que se puede aportar fertilizante o agua en caso de necesitarlo. Y un segundo modo que suelta las semillas en forma de paraguas, con distintas velocidades y niveles de dispersión.
El sistema se completa con un portátil LG Gram y un software de desarrollo propio, con el que se analiza la información provista por el 'smartphone' y con el que se puede hacer un seguimiento tanto de los vuelos de dron como del crecimiento de las plantas. El reconocimiento y análisis del terreno permiten llevar las semillas a los lugares óptimos para su floración.
PASAR A LA ACCIÓN REAL
La deforestación masiva y las emisiones de CO2 suponen las principales causas del cambio climático, cuyo impacto afecta al conjunto de la población mundial. Solo las emisiones de CO2 a nivel global aumentaron un 2,7 por ciento en 2018; 37 gigatoneladas de CO2 que equivalen a 325 millones de coches de combustión nuevos puestos en circulación, como ha indicado el presidente y CEO de LG Electronics Iberia, Jaime de Jaraíz.
El directivo entiende que las empresas tiene un papel importante en el cambio climático. Desde LG han desarrollado el programa Smart Green, de compromiso con el medioambiente, que se ha extendido ya a los 150 países en los que está presente la compañía surcoreana. Es "un llamamiento a todos, particulares, instituciones y sobre todo empresas, para actuar en beneficio del planeta", ha subrayado De Jaraíz.
LG se encuentra entre las cinco compañías que más invierten en I+D Green e impulsa sectores de la construcción y la movilidad sostenible, siendo uno de los principales fabricantes de baterías, sistemas y componentes para coches eléctricos y motor del modelo de vivienda autosuficiente a través de energía solar.
Asimismo, De Jaraíz ha presentado la nueva campaña 'Una persona, un árbol', con la que pretenden involucrar a todas las personas, también a las administraciones públicas, en la repoblación de los bosques. La idea es que la colaboración de todos con el tiempo vaya a más, hasta alcanzar los 47 millones de árboles plantados cada año, y que incluso esta acción llegue a establecerse y consolidarse como una 'fiesta nacional'.