MADRID, 18 (Portaltic/EP)
Los sistemas de votación no están exentos de ataques cibernéticos, lo que ha llevado a Microsoft a desarrollar su sistema ElectionGuard, que protege y hace más accesible el voto en las elecciones democráticas.
Microsoft ha realizado en Aspen Security Forum (Estados Unidos) una demostración de ElectionGuard, instalado en una tableta Surface, con el modo quisco de Windows activado -limita el acceso a una sola aplicación- y vinculado a una impresora estándar y a un mando Xbox Adaptive Controller, para ampliar la accesibilidad.
La compañía, con esta demostración, ha buscado mostrar "cómo es posible hacer la votación más accesible para las personas con discapacidades y más asequible para los gobiernos locales al tiempo que incrementa la seguridad", como explica en un comunicado.
La importancia de un sistema de votación seguro se refuerza con datos de la propia compañía, recogidos por Microsoft Threat Intelligence Center. Como informan, el año pasado notificaron a casi 10.000 clientes que habían sido el objetivo o se habían visto comprometidos por ataques realizados por actores estatales.
De los ataques, el 84 por ciento se digirió contra los clientes de la compañía, mientras que el 16 por ciento lo hizo contra las cuentas personales de los clientes. La mayoría de los ataques estatales se habían originado en Irán, Corea del Norte y Rusia, como detalla Microsoft.
"Los gobiernos y la sociedad civil tienen papales importantes que desempeñar, pero la industria de la tecnología también tiene la responsabilidad de ayudar a defender la democracia", ha declarado la compañía.
CÓMO FUNCIONA ELECTIONGUARD
ElectionGuard permite a los votantes votar directamente tocando la pantalla o con el mando Xbox Adaptive Controller, diseñado para que las personas con parálisis cerebral puedan manejar este tipo de periféricos.
El sistema provee al votante de un código de verificación una vez ha emitido su voto, para que posteriormente pueda comprobar que no ha habido ningún problema, es decir, que su voto ha contado y no ha sido alterado. La web donde se comprueba solo permite la monitorización del voto, pero no del contenido del mismo -no muestra la opción elegida-. Este proceso, además, está encriptado.
Al estar vinculado a una impresora, el votante puede imprimir la papeleta, para introducirla físicamente en la urna correspondiente, como parte de un sistema de votación más tradicional. En este caso, también emite un código de verificación.