La Oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) violó los derechos de los ciudadanos estadounideneses en el uso que hizo de la base de datos de vigilancia de las comunicaciones durante sus actividades entre 2017 y 2018.
El tribunal de vigilancia de inteligencia extranjera de Estados Unidos determinó el pasado año que algunas de las actividades del FBI violaron los derechos de los ciudadanos estadounidenses relativos a la Cuarta Enmienda, la que ofrece garantías judiciales y de privacidad frente a los investigaciones, registros y detenciones arbitrarias.
En este sentido, y como recogen los documentos publicados por la comunidad de inteligencia este martes, agentes del FBI usaron de forma inapropiada esta base de datos de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), con casos identificados en 2017 y 2018.
En ocasiones implicaban indagaciones sobre decenas de miles datos, como correos electrónicos, identificadores digitales o números de teléfono. Entre otros casos se recoge una búsqueda individual de un contratista sobre sí mismo, y otra sobre la plantilla y sus familiares.
Tras el ataque terrorista a las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001, los programas de inteligencia y espionaje de Estados Unidos se expandieron. La opinión pública sobre la gestión de estas bases de datos llevó al FBI a acordar una serie de prácticas para garantizar la privacidad de los ciudadanos.
De esta forma, se registraba la forma en que estas bases de datos eran utilizadas, para identificar posibles irregularidades, como las que identificó el tribunal en octubre de 2018. En consecuencia, consideró que "los procedimientos de consulta y los procedimientos de minimización del FBI no son consistentes con los requisitos de la Cuarta Enmienda", como determinó el juez Boasberg.