Mar Gonzalo
Madrid, 26 oct (EFECOM).- En sus escasos cuatro años de vida la chilena Cornershop ha pasado de ser el frustrado objeto de deseo de Walmart, la mayor minorista del mundo, al trampolín con que Uber quiere irrumpir en el reparto de la compra a domicilio, un mercado que se espera crezca al 13 % anual en el próximo lustro.
Así lo calcula la consultora Edge by Ascential, que sostiene que la venta online de alimentos y bebidas (grocery), dominado hoy por Amazon y Walmart, llegará a mover 162.000 millones de dólares en todo el mundo en 2024.
"Vamos a ver un gran cambio en la venta online y omnicanal de comestibles en los próximos años", asegura la analista de esa consultora Violetta Volovich, que añade que "las barreras de entrada se están reduciendo y los minoristas están acometiendo fuertes inversiones en tecnología" y "sellando alianzas" para ganar posiciones.
Hoy en el mundo aún sólo el 3 % de la compra se hace online, lo que da una idea del recorrido que tiene un nicho de mercado que Uber asegura estar muy relacionado con su estrategia de crecimiento y en el que lleva tiempo queriendo abrirse hueco.
Ello explica su reciente anuncio de compra de Cornershop, una operación que aún debe ser aprobada por las autoridades de defensa de la competencia y que espera tener cerrada a comienzos de 2020.
Su intención es tomar una participación mayoritaria en la firma nacida en Chile, que ya domina el mercado también en Colombia y México, y que además tiene actividad en Canadá.
Precisamente su dominio del mercado mexicano atrajo hace un año a Walmart, que pactó comprarla por 225 millones de dólares, aunque en junio las autoridades de la competencia de ese país decidieron impedirlo.
En esta ocasión las compañías no han informado de la cantidad ofrecida, aunque el diario chileno El Mercurio ha publicado recientemente que su intención es comprar el 51 % por 450 millones.
Los analistas destacan que esa cantidad es cerca del doble por la mitad del capital, lo que supone valorar Cornershop por cuatro veces más de lo que en su día ofreció Walmart, que a día de hoy sigue colaborando con la firma latinoamericana en Canadá.
Uber no oculta que su intención es cubrir los principales ámbitos que implican desplazamientos urbanos, desde la movilidad de los ciudadanos (ya sea en coches, patinetes, bicis, transporte público o incluso helicópteros) hasta la entrega a domicilio de la compra o de la comida para llevar, de la mano de Uber Eats, cuya promoción está forzando a la firma a inyectar enormes cantidades de capital y acumular pérdidas millonarias.
"Queremos ser el sistema operativo de la vida cotidiana" de la gente, como dijo su consejero delegado, Dara Khosrowshahi, para defender que el reparto de la compra era un ámbito de expansión natural para la compañía.
De materializarse la adquisición, Cornershop -que igual que Uber Eats también funciona como agregador, en este caso de supermercados- se convertiría en el trampolín de Uber para irrumpir en el ámbito del reparto a domicilio, un mercado en el que los analistas coinciden en apuntar que aún nadie ha dado el campanazo.
Fuentes cercanas a la operación explican a Efe que la compra de Cornershop es coherente con la estrategia de Uber de entrar en nuevos nichos de mercado adquiriendo una compañía que destaque en su nicho, integrarla en su plataforma y luego hacerla crecer.
Sus propios directivos han dejado entrever que quieren hacer crecer lo que podría ser "Uber Shop" en América Latina y llevarla también a EEUU.
En ese codiciado país tendría que competir, además de con gigantes como Amazon, Walmart y Costco (líderes mundiales), con otros locales ampliamente implantados, como Instacart, fundada por un exempleado de Amazon y hoy líder en EEUU y Canadá, y Postmates, creada en 2011, que se autodefine como "anti Amazon" y que también ha empezado a operar en México.
Amazon, que según Deloitte ya es el cuarto mayor vendedor minorista del mundo (por detrás de Walmart, Costco y Kroger), es dueña de Whole Foods (una de las mayores cadenas de supermercados de EEUU) y se rumorea que planea el lanzamiento de su propia cadena de tiendas físicas.