MADRID, 13 (Portaltic/EP)
Un estudio realizado a 10.000 páginas web de Reino Unido ha descubierto que tan solo un 11,8 por ciento cumple los requisitos mínimos impuestos por la Unión Europea (UE), mientras que el resto utiliza técnicas para hacer más difícil rechazar el seguimiento de las 'cookies' al usuario.
El Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) es la normativa que regula la protección de los datos de los ciudadanos de la UE desde el 2018. Siguiendo dichas normas, las webs necesitan el consentimiento de los usuarios, y este permiso debe ser informado, específico y proporcionado de manera libre.
Sin embargo según el estudio publicado por la Universidad de Cornell (Estados Unidos) al que ha tenido acceso TechCrunch, solo el 11,8 por ciento de las páginas webs analizadas estaban utilizando técnicas que cumplían todos los requisitos anteriores del RGPD.
Las páginas web utilizan para gestionar el consentimiento a 'cookies' plataformas de gestión de consentimiento. La forma más común es a través del consentimiento implícito, usado en un 32,5 por ciento de los casos. Esta técnica asume el consentimiento del usuario a las 'cookies' con tan solo visitar la página web.
Además las páginas webs dificultan el rechazar el rastreo del usuario. En algunos casos ocurre porque no existe un botón para 'rechazar todas' o que el usuario tenga que hacer varios clics para encontrarlo. Sin embargo, la opción de 'Aceptar todas las cookies' nunca era relegada a una segunda ventana.
Otro de los problemas descubiertos por el estudio es el número de rastreadores externos que utilizan las plataformas de gestión de 'cookies', que van desde los 58 a los 542 vendedores, haciendo más complicado que los usuarios se informen correctamente para dar su consentimiento.
Estas técnicas, conocidas en el estudio como "patrones oscuros", hacen más probable que los usuarios acepten las 'cookies' antes que rechazarlas. Los investigadores descubrieron que si la página web no disponía de un botón de rechazar en la primera ventana se incrementa en un 23 por ciento el número de usuarios que aceptarían el seguimiento. Mientras que si existiera dicho botón se reduciría el consentimiento entre un 8 y un 20 por ciento.
Como afirman los investigadores, esta situación debe cambiar ya que estas técnicas pueden cambiar el consentimiento en un 40 por ciento.