Telefónica lidera las caídas de la Bolsa de Madrid este jueves tras hacer públicos sus resultados de 2019, en los que ha presentado una reducción del beneficio del 65,7% hasta los 1.142 millones de euros.
A primera de hora de la jornada las acciones de la operadora llegaron a caer hasta un 6% y a media mañana lo hacen un 5% hasta los 6,21 euros, con lo que pierde todo lo que había recuperado en la última semana. Estamos ante una de sus mayores caídas desde el referéndum del brexit, en junio de 2016.
La compañía ha explicado esta reducción de sus ganancias por el impacto de extraordinarios como la salida del perímetro de sus negocios en Centroamérica, correcciones contables en México y Argentina, el cambio registrado por la adopción de la nueva normativa contable NIIF 16 y el Plan de Suspensión de Empleo ejecutado el año pasado.
Los datos reportados a la CNMV este jueves indican que Telefónica ganó 1.142 millones de euros en 2019 frente a los 3.331 millones del año anterior, mientras que el flujo de caja libre llegó a los 5.912 millones, un crecimiento interanual del 20,6%.
En términos operativos, la compañía volvió a mejorar sus ingresos en sus mercados más importantes: Brasil, Reino Unido, Alemania y España. El caso español es particularmente destacable ya que sus competidores más directos: Orange y Vodafone, redujeron sus ingresos el año pasado.
En todo el mundo, Telefónica cerró el año con unos ingresos de 48.422 millones de euros, lo que supone una caída del 0,6% lastrada por el impacto de la depreciación de las divisas latinoamericanas. Sin este efecto, el crecimiento en términos orgánicos fue de 3,2%.
Del mismo modo, la operadora ha confirmado que se mantiene el dividendo en 2020 hasta los 0,4 euros por acción a pagar en diciembre de 2020 (0,2 euros) y junio de 2021 (0,2 euros por acción).
Resultados operativos
Por su parte, el Oibda -medida de la teleco para reflejar su marcha operativa- llegó a los 15.119 millones de euros, un 0,6% menos en términos reportados y un 1,9% de crecimiento si quitamos el impacto de las depreciaciones.
Del mismo modo, Telefónica siguió avanzando en su objetivo de reducir su deuda neta que cerró el 31 de diciembre de 2019 en los 37.744 millones, esto es 3.330 millones menos que un año antes, un retroceso del 8,1%. Incluyendo eventos posteriores al cierre, la deuda neta se reduciría hasta 37.000 millones.
Durante este curso se cerró la venta de sus activos en Latinoamérica, torres de telecomunicaciones y parte de sus centros de datos. La deuda es uno de los elementos que más ha lastrado a la operadora, en especial en los mercados bursátiles, por lo que su reducción ha sido una de las prioridades de Pallete desde que asumió la presidencia en abril de 2016. En cuatro años, Pallete ha logrado reducir la deuda en casi 11.500 millones de euros.
Para 2020 el objetivo es seguir monetizando las más de 50.000 torres que no son prioritarias para la compañía y la gestión de su cartera de activos en Latinoamérica, mercado que, a excepción de Brasil, ya no es prioritario en el nuevo plan estratégico de la operadora. Según este plan, los mercados prioritarios son España, Reino Unido, Alemania y Brasil.
Respecto de estos resultados, el presidente de la compañía, José María Álvarez Pallete, ha indicado que la operadora es cada vez más eficientes gracias a la digitalización y al apagado de legado. "Hemos generado un fuerte flujo de caja libre en 2019, que nos ha permitido continuar reduciendo deuda por 11 trimestres consecutivos, gracias también a la venta de activos y a iniciativas adicionales que mejoran el retorno sobre el capital empleado".
"Hemos seguido invirtiendo en redes de nueva generación, consolidando así nuestro liderazgo en fibra, tanto en Europa como en Latinoamérica. Y, gracias a años de inversión, podemos decir que nuestro pico de inversión sobre ingresos ha quedado atrás". Del mismo modo ha señalado que "hemos comenzado 2020 con una buena evolución operativa y estamos enfocados en ejecutar el plan que anunciamos a
finales del pasado año", ha indicado.
Ingresos en España
Dentro de los ingresos, destacó el desempeño de Telefónica Brasil, su mayor mercado en Latinoamérica y el segundo a nivel mundial y Alemania. En el caso brasileño, alcanzaron los 10.035 millones de euros, un 1,9% de crecimiento orgánico, mientras que Telefónica Deutschland facturó 7.399 millones, un 1,1% de crecimiento y Telefónica UK llegó a los 7.109 millones y una mejora del 4,7%
En cuanto a España, la facturación alcanzó los 12.767 millones de euros, un crecimiento del 0,5% que se produce en el año de la arremetida del bajo coste y de una de las mayores guerras comerciales del sector. El pasado 2019 marcó una dura batalla de portabilidades entre todas las operadores, un curso en el que finalmente Telefónica y Movistar han logrado aumentar ingresos.
En términos operativos, Telefónica España cerró 2019 con 41.837.700 de accesos, lo que supone un retroceso del 0,1% en un año. Los accesos de fibra minorista aumentaron un 10% y los de móviles de contrato un 5%, mientras los de banda ancha fija se reducen un 1,5% interanual y los de televisión de pago caen ligeramente.
Al cerrar diciembre, la operadora tenía 4.325.000 clientes de fibra, un 9,8% de crecimiento interanual, mientras que los clientes de televisión cerraron en 4.073.800, un 0,4% menos que al cerrar 2018. Por otro lado, los accesos a telefonía móvil llegaron a los 18.916.000, un crecimiento del 3% menos.
La compañía indica que en España su apuesta por clientes de mayor valor se ha traducido en el crecimiento del ARPU convergente hasta los 88,4 euros en el último trimestre, un crecimiento del 0,2%.