El grupo MásMóvil logró seguir mejorando sus ingresos y ganando clientes en un mercado de telecomunicaciones adverso y una dura guerra comercial. Sus principales competidores como Vodafone y Orange han reducido su facturación, mientras que la compañía liderada por Meinrad Spenger podido ha seguido creciendo.
Los datos reportados este viernes a la Comisión Nacional del Mercado y Valores (CNMV) indican que la compañía ganó 93 millones de euros en 2019, un 32% más. MásMóvil también ha reportado el beneficio ajustado que se situó en 154 millones de euros, un crecimiento del 14%.
El resultado neto ajustado incluye gastos operativos no recurrentes -como la venta de la red de fibra a Macquarie por 144 millones- la amortización de base de clientes adquirida (27 millones), el plan de incentivos a la dirección (40 millones) y el impacto de la recompra del convertible de Providence (108 millones).
Del mismo modo, el Ebitda (resultados operativos brutos) llegó a los 562 millones de euros, un crecimiento del 80% y el Ebit (resultados operativos netos) se situó en los 290 millones, un 91% más.
Con todo, el grupo sigue liderando el crecimiento en clientes y aumento de ingresos en el mercado español. Los ingresos totales llegaron a 1.681 millones en 2019, lo que supone un crecimiento del 16%. Del mismo modo, los ingresos por servicio (mercado residencial) llegaron a los 1.462 millones, un 24% de mejora.
Crecimiento en clientes
MásMóvil llegó a los 8,9 millones de clientes durante 2019 tras ganar más de 1,3 millones el ejercicio pasado, un 15% más. De esta manera, el número de clientes de banda ancha creció en 507.000, una mejora del 51% hasta situarse en 1,5 millones.
Por su parte, los clientes de móvil de post pago mejoraron en 844.000 (un 18% de crecimiento) hasta los 5,6 millones. Por el contrario, los clientes de móvil de prepago se redujeron hasta los 1,8 millones, 200.000 menos y unas caída del 9%.
Tras el acuerdo mayorista ampliado con Orange durante 2019, MásMóvil ha aumentado su huella de fibra óptica en propiedad y con derechos de uso desde los 8,2 millones de unidades inmobiliarias a los 13,4 millones en 2019 (un 63% de crecimiento). El objetivo es alcanzar más de 14 millones en 2020.
La compañía ha mantenido sus objetivos financieros. Para 2020 espera registrar un Ebitda ajustado de entre 570 y 600 millones de euros y un margen Ebitda del 30-32%. Para 2021 esperan un Ebitda ajustado de entre 670 y 700M millones y un margen del 32-34%.
Finalmente, la deuda la deuda neta alcanza los 1.655 millones de euros, una cifra que casi duplica los 918 millones del año 2018. El crecimiento de la deuda refleja la recompra del bono convertible de Providence durante el año pasado por un precio total de aproximadamente 900 millones de euros.