Amazon Spain Fulfillment, la filial logística del gigante de comercio electrónico en España pagó 5,1 millones de euros en impuesto sobre beneficios (Sociedades) en España, según consta en sus cuentas del año 2019 remitidas al Registro Mercantil.
Esto supone pagar un millón de euros más que los 3,9 millones de euros del año 2018, un 30% de crecimiento. Este aumento se genera por la disminución de los gastos operativos que repercutió en un aumento del beneficio y de los resultados operativos.
La empresa dedicada a gestionar los almacenes y preparar y despachar los pedidos desde los centros logísticos de la empresa en España, y actualmente decretada servicio esencial en medio del confinamiento, redujo sus ingresos hasta los 331,1 millones, de euros, lo que supone una caída del 10%, desde los 364,9 millones registrados en 2018.
Un año 2019 en el que sus gastos de personal aumentaron hasta los 139,3 millones de euros, por encima de los 109 millones del año anterior. Esto se produce por un aumento del 30% su plantilla, pasando de los 2.982 trabajadores en 2018 a los 3.901 al cierre de año pasado, 919 empleos más.
El principal parámetro que permitió la mejora de las cuentas fue el gasto operativo que cayó desde los 207,6 millones hasta los 145,3 millones de euros.
Procedencia de los ingresos
De esta manera, la empresa registró un beneficio neto de 18,25 millones en 2019, lo que supuso multiplicar casi por seis el logrado un año antes, cuando ganó 3,16 millones de euros.
Del total de la facturación, la mayor parte, 218,27 millones de euros (66%), procedió de prestaciones de servicios fuera de España a Amazon EU, la matriz de las filiales españolas y de buena parte de las europeas, domiciliada en Luxemburgo. Mientras que el resto, 112,79 millones de euros se vincularon al mercado interior. El año anterior la proporción era menor ya que solo el 60% se vinculaba al extranjero.
En España Amazon opera con cuatro sociedades: Amazon Web Services Spain, Amazon Spain Services, Amazon Spain Fulfillment y Amazon Online Spain, pero la logística es la que genera mayor facturación y contrata a más empleados.
Todas estas sociedades dependen de su filial Amazon EU a la que facturan servicios profesionales. Una estructura habitual en los gigantes tecnológicos que facturan los ingresos en la mayoría de los países a través de otros con mayores ventajas fiscales y países como España se quedan como meros intermediadores de servicios.
San Fernando de Henares
Esto significa que su facturación -en el caso de Amazon Spain Fulfillment- sería en realidad mucho mayor que los 331 millones declarados y, por tanto, su pagarían más impuestos por beneficios.
Amazon Spain Fulfillment es además la sociedad de la que depende el megacentro logístico de San Fernando de Henares en Madrid, el mayor de la compañía en España y que actualmente se ha transformado en esencial porque de él depende gran parte de la distribución del comercio online durante el confinamiento.
Un centro al que se le ha realizado hace un mes una inspección laboral para revisar sus condiciones sanitarias y de protección de sus empleados ante la pandemia de coronavirus. Los sindicatos siguen denunciando que no se cumplen todas las condiciones mínimas y la empresa dice que ya tienen activados todos los protocolos.