El presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, ha afirmado que el propósito de la compañía nunca ha tenido más sentido que durante la crisis del Covid-19, que ha sacado "lo mejor de Telefónica", y ha remarcado que el plan de acción lanzado en noviembre de 2019 ofrece a la empresa "una hoja de ruta precisa" para abordar los desafíos más inmediatos.
En una carta a los accionistas, Pallete ha señalado que, tras la emergencia sanitaria, "toca ahora encarar el desafío enorme que supone para todos el futuro inmediato", y ha remarcado que en el grupo lo hacen provistos de "una hoja de ruta precisa", el Plan de Acción presentado a finales de 2019 y que guía a la empresa "rumbo a la nueva Telefónica".
"Nos anima además en esta nueva fase más que nunca el firme propósito de avanzar. Y lo haremos sintiéndonos fortalecidos como comunidad tras la superación de la prueba extrema que ha supuesto la crisis del Covid-19", ha incidido.
En este contexto, ha subrayado que 2020 quedará en la historia de la compañía como el año en que superó satisfactoriamente la prueba de la pandemia, pero también como el ejercicio en que consiguió "importantes hitos" en la ejecución de dicho plan de acción, apenas seis meses después de su presentación y pese a las circunstancias excepcionales que se han dado en el último trimestre.
En concreto, remarca que ya gestiona los negocios en Hispanoamérica como una unidad autónoma e independiente operativamente y se ha avanzado para estar preparados para una potencial separación financiera, mientras se analizan "todas las alternativas para seguir expuestos a la región de forma rentable".
"Lo mejor de Telefónica"
Además, ha remarcado que en Telefónica Tech han sellado importantes acuerdos estratégicos con Microsoft y Google, mientras su equipo gestor está totalmente focalizado, trabajando activamente en la segregación de estos negocios, cuyos ingresos siguen creciendo a tasas de dos dígitos.
Por su parte, Telefónica Infra está impulsando múltiples proyectos de infraestructuras y se continúa "a buen ritmo" con la monetización de su cartera de torres, mientras que en Reino se ha cerrado en pleno confinamiento la mayor operación corporativa de la historia de Telefónica, la unión de su filial O2 con Virgin Media, propiedad de Liberty Global.
El presidente ejecutivo de Telefónica ha recordado que en la carta enviada el año pasado indicaba que "la historia de Telefónica es una historia de permanente cambio", pero ha admitido que al escribir esas palabras no podía sospechar que la sociedad se vería sometida a "una prueba de cambio tan agudo y acelerado como el provocado por la pandemia del Covid-19".
En este sentido, el presidente ejecutivo de Telefónica ha remarcado que gracias a la "claridad" en la misión y en los valores de la compañía, "esta crisis ha sacado lo mejor de Telefónica". "Nunca nuestro propósito ha tenido más sentido", ha incidido.
Así, ha remarcado que Telefónica se convirtió "en el soporte que mantuvo viva la actividad empresarial, cultural, educativa, laboral y financiera" de las sociedades y que incluso la propia respuesta sanitaria y administrativa a la emergencia descansó sobre sus redes. "El cumplimiento de nuestra misión se transformó en un asunto vital para toda la sociedad", ha subrayado.
Teletrabajo en Telefónica
En este contexto, ha indicado que la "primera y primordial contribución" de Telefónica a esta emergencia sanitaria, social y económica ha sido mantener las comunicaciones, pero ha añadido que en esas "semanas difíciles" la compañía dio también otras respuestas a sus distintos grupos de interés en todos los mercados.
En concreto, ha mencionado su esfuerzo por proteger la salud de los empleados, con un 95% de la plantilla teletrabajando desde el primer momento, así como las medidas para suavizar el confinamiento de su clientes, con un aumento de los volúmenes de datos y la extensión de la oferta de entretenimiento sin coste adicional, o aliviar la necesidad de liquidez de sus proveedores.
Además, ha agregado que han atendido las expectativas financieras de sus millones de accionistas y han optado por mantener el dividendo de 0,40 euros por acción, ya que saben que muchos de ellos cuentan con los ingresos derivados de sus acciones como parte importante de su renta.
Por último, ha resaltado las distintas contribuciones hechas a la sociedad, como la dotación de un fondo de 25 millones de euros para comprar material o la iniciativa para proporcionar conectividad en hospitales como el del Ifema en Madrid y hoteles medicalizados, entre otras. Además, ha añadido que ha puesto a disposición de las administraciones y el sistema de salud su conocimiento técnico, los recursos humanos y materiales a su alcance.