Sony y Nokia se suman Ericsson y renuncian a asistir al Mobile World Congress de Barcelona 2021
Microsoft también se bajó del evento hace unas semanas al considerar que no se daban las garantías necesarias para su realización.
10 marzo, 2021 15:29Noticias relacionadas
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El Mobile World Congress (MWC) de 2021 se enfrenta por segundo año a la pesadilla. Ericsson fue la primera en anunciar que no asistiría por razones sanitarias como adelantó Invertia y este miércoles han confirmado que también se bajan del evento dos gigantes tecnológicos y de las redes: Sony Mobile y Nokia.
En el caso de las dos compañías, han indicado que no tendrán presencia física en Barcelona y que no desplazarán a sus trabajadores a la Ciudad Condal. Sin embargo, han indicado que su objetivo es poder participar de manera virtual en los eventos programados en la feria.
Nokia ha dicho que quiere proteger la "salud de los trabajadores, clientes y socios". Debido a la naturaleza internacional del evento y "con la vacuna aún en sus primeras fases han decidido participar solo en el evento virtual". "Entendemos que GSMA está planificando una variedad de actividades online y esperamos trabajar junto a ellos para comprender cómo podemos participar".
Por su parte, Sony ha indicado que "no participará en el MWC de 2021". Y ha agregado que "a medida que el mundo cambia cada vez más hacia las oportunidades digitales y en línea para prevenir la propagación del nuevo coronavirus (Covid-19), Sony Mobile se comunicará con sus clientes de manera que pueda ofrecer nuestras emocionantes noticias sobre productos a una audiencia más amplia".
Ericsson, Sony Mobile y Nokia se suman a la baja de Microsoft que nunca pensó en asistir pese a tener contratados los espacios, aunque no lo han hecho público. Hace un año un incipiente coronavirus generó la cancelación del MWC de 2020 tras una oleada de bajas. Al menos unas veinte empresas renunciaron al evento antes de que la GSMA decidiese suspenderlo.
Se abren dos escenarios
Unas bajas que abren dos escenarios: postergarlo nuevamente para finales de este año o cancelarlo por segundo año consecutivo. En el primero de los casos estaríamos ante el segundo aplazamiento del MWC de este año a causa de la pandemia del coronavirus.
Originalmente el evento de 2021 se iba a celebrar entre el 1 y el 4 de marzo, pero ante la situación sanitaria se pospuso en septiembre del año pasado hasta este 28 de junio. Una de las ideas sobre la mesa desde hace un mes es pasar el evento al último trimestre de este año.
En este sentido, y si no mueve ficha la GSMA, las informaciones confirmadas por este diario indican que en los próximos días se podrían confirmar nuevas bajas, en concreto de operadoras y grandes gigantes digitales estadounidenses que ya el año pasado fueron los primeros en renunciar tras LG y Ericsson. Compañías como AT&T, Amazon, Facebook, Intel o Cisco ya cursaron baja en 2020.
Unas salidas inminentes que estarían supeditadas a que la GSMA cancele el evento o lo postergue algunos meses. Y es que en una macabra jugada del destino, la sucesión de acontecimientos comienza a parecerse demasiado a las deserciones masivas de hace doce meses, una situación que obligó a la GSMA a cancelar la feria un mes antes de su pistoletazo de salida.
Paradójicamente, esta oleada de bajas comenzó a sucederse horas después de que la GSMA presentara su protocolo de seguridad sanitaria y que confirmara que las fechas propuestas, del 28 de junio al 1 de julio, se mantenían sin cambios pese a la pandemia.
Vacunación en Europa
Las compañías que han renunciado a participar físicamente consideran insuficientes estos protocolos, pero no porque las medidas sean ineficaces, sino que porque creen que es imposible realizar un evento de 50.000 personas -según estimaciones de la GSMA- en junio.
Todo ello con los contagios todavía disparados en todo el mundo y con un ritmo de vacunación extremadamente lento en Europa. Un aplazamiento de tres o cuatro meses, o directamente una suspensión definitiva para febrero de 2022 daría tiempo a que se acelerara la vacunación, que bajaran los contagios y a que el formato pudiese ser verdaderamente semipresencial.