El Grupo Euskaltel registró unas pérdidas de 2,1 millones de euros en el primer trimestre de 2021, según los resultados remitidos este miércoles a la CNMV. Esta cifra contrasta con los beneficios obtenidos en igual periodo del año pasado cuando ganó 19,1 millones de euros.
Del mismo modo, los ingresos llegaron a los 174,2 millones de euros, un crecimiento del 1,4% frente al primer trimestre de 2020 cuando fueron de 171,8 millones. El Ebitda de este periodo fue de 73 millones de euros, un 16,7% menos que los 87,7 millones de hace un año.
El grupo presidido por José Miguel García explica que las pérdidas se produjeron por el aumento de costes por el crecimiento de Virgin Telco, las campañas de retención de clientes (41,7 millones de costes comerciales) y la suspensión de las renegociaciones de los acuerdos mayoristas como consecuencia de la opa lanzada por MásMóvil.
Precisamente éstos son los primeros resultados que la compañía presenta después de la oferta de MásMóvil por todo el grupo por 2.000 millones de euros. La operación está en manos de los reguladores y no será hasta finales de este año, o comienzos del próximo, que las dos operadoras no estarán integradas.
Respecto de su marcha operativa el Grupo -que incluye las marcas Euskaltel, R, Telecable y Virgin- superó los 847.000 clientes en el mercado residencial, lo que supone un crecimiento del 10% sobre el primer trimestre del ejercicio anterior, con más de 78.000 nuevos clientes.
Número de clientes
Del total de los clientes de mercado masivo del Grupo, 737.000 corresponden a clientes sobre red fija, y 110.000 a usuarios que contratan únicamente telecomunicaciones móviles.
Respecto de Virgin, diez meses después de su lanzamiento la marca ha superado los 101.000 clientes de los cuales 80.000 tienen servicios fijos y 21 solo móvil. Esto supone que los ingresos por estos clientes lleguen a los 10,5 millones de euros.
Desde el punto de vista financiero, la compañía tiene una deuda neta de 1.486 millones de euros. Esto supone una reducción de dos millones de euros, a pesar de la ralentización comercial por la Covid, las inversiones en fibra óptica y el pago de dividendos.
Por otro lado, la compañía ha anunciado que ha decidido mantener su política de dividendos para 2020, que será de 0,31 euros por acción. El Grupo distribuirá un dividendo complementario de 0,17 euros por acción en la fecha que determine la próxima Junta General de Accionistas.