Una parte fundamental para conseguir crear en el país esas condiciones óptimas que aceleren el despliegue y la adopción del 5G es poner a disposición de los operadores de telecomunicaciones el espectro radioeléctrico que se ha reservado para el desarrollo de esta tecnología.

Un requisito indispensable que está a punto de dar un nuevo e importante paso adelante en España. Y es que una vez que los operadores tengan en su poder ese espectro, podrán empezar a desplegar masivamente esas redes y ofrecer servicios 5G a clientes particulares y empresas. 

Previsiblemente, esta próxima semana la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales asignará a Movistar, Orange y Vodafone la parte de la banda de frecuencias de 700 MHz en la cada una de ella tendrá ubicado el espectro obtenido en la última subasta.

Así lo adelantó la pasada semana el secretario de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, Roberto Sánchez, en la inauguración del II Observatorio de 5G organizado por EL ESPAÑOL e Invertia.

Resultados de la subasta

La subasta de la banda de 700 MHz tuvo lugar a mediados del pasado mes de 2021. En apenas dos jornadas y tras solo doce rondas Telefónica, Orange y Vodafone se hicieron con 20 MHz cada una por un importe conjunto de 1.010 millones de euros, cifra similar al precio de salida de 995,5 millones de euros.

Las concesiones tendrán una duración mínima de 20 años y máxima de 40 años y llevan aparejadas unas obligaciones de cobertura. Además, están sujetas a una tasa anual por reserva de espectro de 15,5 millones de euros, que se puede reducir a cambio de inversiones en los próximos dos años.

En concreto, Orange y Vodafone se hizo cada una con lotes de 2x10 MHz (Orange al sumar dos bloques de 2x5 MHz) por 350 millones de euros, el precio de salida. Por su parte, Telefónica invertió 310 millones de euros por el bloque de 2x10 MHz, un 14,8% más de lo fijado inicialmente. 

El bloque que se adjudicó Telefónica tenía un precio de salida de 270 millones de euros, algo inferior al del resto, debido a que contaba con unas mayores obligaciones. Así, la compañía tendrá cubrir antes de junio del año 2025 con 5G todos los municipios de más de 20.000 habitantes, los aeropuertos, puertos y estaciones del AVE, así como las autopistas, autovías y carreteras multicarril.

Acuerdo entre operadores

Una vez resuelta en julio la cantidad de espectro que se adjudica cada operadora, llegaba el momento de decidir en qué parte exacta de la banda de 700 MHz iba a estar cada compañía. Un proceso que estaba ya definido en la orden de bases de la subasta.

Según ha podido confirmar EL ESPAÑOL - Invertia, el reparto de la banda ha sido acordado entre los tres operadores de telecomunicaciones, que era la primera de las alternativas recogida en las bases para marcar esas ubicaciones.

Como adjudicatario del lote con más obligaciones, Telefónica tenía preferencia para elegir dónde quería tener eso 20 MHz. En el caso de las frecuencias asignadas por Vodafone y Orange, al haber pagado lo mismo en la subasta, se contemplaba la opción del sorteo.

Sin embargo, finalmente, no ha hecho falta recurrir a dicho método, ya que las dos compañías se han puesto de acuerdo y así se lo han transmitido a la Secretaría de Estado, que validará previsiblemente esta semana el reparto pactado entre todos los actores. 

La experiencia en 3,5 GHz

El proceso de asignación de las frecuencias en la banda de 700 MHz ha sido afortunadamente mucho más rápido y sencillo en comparación con lo que se vivió con la banda de 3,5 GHz. En este caso, el espectro se adjudicó en verano de 2018, pero hasta el pasado mes de julio no se logró el acuerdo de todos los operadores. 

Es cierto que de partida era un proceso bastante más complicado, ya que conllevaba reordenar todo el espectro comprendido entre los 3.400 MHz y los 3.800 MHz con el fin de que todas las compañías tuvieran sus frecuencias contiguas.

Esto implicaba que operadores que ya tenían espectro en estas bandas desde hace años tuvieran que invertir en desinstalar o modificar parte de sus estaciones base para adaptarse a las nuevas frecuencias de las que disponían tras la reordenación. 

Incluso Telefónica y MásMóvil llegaron a solicitar al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital que se les compensara por esta modificación de las frecuencias. Petición que fue rechazada con el respaldo además de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).  

La senda hacia el 5G

Con estas dos bandas de frecuencias en manos de los operadores, Roberto Sánchez afirmó en el II Observatorio 5G que las compañías ya tienen "vía libre" para el despliegue de las redes de nueva generación móvil. 

A estas dos bandas para el 5G se sumará en 2022 otra más, la de 26 GHz, la tercera y última considerada clave para la tecnología de quinta de generación. Está previsto que la subasta y la asignación de la misma tenga lugar el próximo año.

La experiencia adquirida en los proyectos pilotos, el amplio despliegue de fibra y el reparto del espectro, junto con el apoyo que darán los fondos europeos Next Generation al 5G, hacen pensar que 2022 supondrá un punto de inflexión para el esta tecnología.

"El año que viene ya comenzaremos a ver esa pequeña explosión de uso de estas tecnologías", aseguró Sánchez, quien recordó que el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España tiene 1.500 millones de euros destinados a impulsar el despliegue del 5G.

El marco de este plan, el Gobierno tiene previsto lanzar en breve el Plan Único 5G, destinado a impulsar el despliegue de redes en zonas rurales. Para ello se contemplan unas ayudas del entorno de los 150 millones de euros, cuya ejecución comenzará en 2022.