El plan de bajas de Telefónica cumple las expectativas de adhesión pendiente de posibles vetos en áreas críticas

El plazo para adherirse al plan de bajas voluntarias lanzado por Telefónica España para trabajadores a partir de 55 años y con más de 15 de antigüedad en la empresa concluyó la pasada medianoche con un nivel de aceptación que ha cumplido las expectativas fijadas para esta proceso. Sin embargo, la cifra exacta de empleados que saldrán de la compañía está pendiente aún de los posibles vetos que se produzcan en las áreas calificadas como críticas. 

Telefónica comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que estimaba que el número máximo de empleados que se acogerían a este Plan de Suspensión Individual (PSI) iba a rondar los 2.700, aunque fuentes conocedoras han informado a EL ESPAÑOL - Invertia que las expectativas ya quedarían cubiertas si la cifra se sitúa finalmente en torno a las 2.400 o 2.500 bajas.

Las últimas cifras que la compañía ha trasladado a los sindicatos reflejan que a principios de esta semana ya se habían presentado alrededor de 2.220 solicitudes, pero en la reunión de la comisión de seguimiento del PSI celebrada este jueves la dirección rehusó proporcionar datos más actualizados antes de que se cerrara el plazo de adhesión, según informan fuentes de CC.OO.

De hecho, tanto desde CC.OO. como de UGT han indicado a este diario que una parte importante de los trabajadores suelen esperar hasta el último momento para comunicar una decisión tan importante como la de acogerse o no a este plan, tal y como se vio reflejado en los anteriores PSI lanzados en 2016 y 2019. 

Sin embargo, también se ha vuelto a producir el efecto contrario, ya que alrededor de 100 personas se apuntaron al plan de bajas voluntarias el mismo 29 de diciembre, cuando se abrió el plazo de adhesiones después de que el día anterior la empresa y los representantes de los trabajadores firmaran el acuerdo sobre sus condiciones.

Vetos en áreas críticas

Precisamente una de las condiciones que diferencia este nuevo PSI de los dos anteriores es la que decidirá cuál es el número exacto de trabajadores de Telefónica que salgan de la compañía con este plan en comparación con las solicitudes de adhesión recibidas.

Mientras que los PSI de 2016 y 2019 la posibilidad de adherirse al plan de bajas fue universal y voluntaria, sin derecho a veto, en esta ocasión la dirección ha dividido la compañía en dos tipos de áreas, de las cuales una parte han sido consideradas críticas para la actividad de la compañía y el resto no. 

En concreto, el acuerdo al que llegaron empresa y sindicatos recoge que en las divisiones calificadas de estratégicas el porcentaje máximo de salidas será del 38% del total de su plantilla, mientras que para el resto de áreas será del 75% y para los responsables de equipo (coordinación, jefatura y gerencia) no habrá límites. 

Estos porcentajes sitúan el número máximo de trabajadores que pueden acogerse al plan de bajas voluntarias hasta 2.982 personas. El número de empleados que cumplen los requisitos de edad (cumplir 55 años o más en 2022) y antigüedad (al menos 15 años en la empresa) asciende a 4.532.

Sede de Telefónica en Madrid. Europa Press

Este cambio fue uno de los motivos principales por los que se dilató la firma del acuerdo entre la dirección y los representantes de los trabajadores, que abogaban por mantener el carácter universal y voluntario que caracterizó planes anteriores.

Finalmente, los sindicatos consideraron que los últimos porcentajes presentados por la empresa, que fueron revisados al alza en varias ocasiones, permitirían que el plan se aplicara sin grandes problemas y aceptaron firmar el acuerdo. 

Por ello, una vez se conozca el número definitivo de solicitudes y las áreas a los que pertenecen los trabajadores, lo más probable es que en algunos casos se supere el porcentaje del 38% marcado y la compañía tenga que rechazar las peticiones de salida de algunos empleados.

En la negociación del PSI, las dos partes pactaron que los trabajadores cuya solicitud no haya sido aceptada queden registradas con el objetivo de que no sufran penalizaciones si se pudieran adherir a otros posibles procesos que la compañía lleve a cabo en el futuro.

Primeras salidas

La intención de Telefónica es que las salidas de los trabajadores en el marco de este PSI se lleven a cabo durante el mes de febrero. Por ello, según han informado fuentes de CC.OO. a EL ESPAÑOL - Invertia, la empresa ha empezado a confirmar este mismo jueves de forma individualizada las primeras aceptaciones de solicitud de adhesión. 

En concreto se trata de trabajadores que ocupan posiciones de gerencia, jefatura o coordinación, así como de personal del resto de áreas no críticas. El proceso de firma de los correspondientes contratos de suspensión de la relación laboral se realizará por medios telemáticos.

Por otro lado, el sindicato también ha solicitado a la empresa en la reunión de este jueves que para el cálculo del salario regulador de los profesionales adscritos a carrera comercial se tenga en cuenta, como establecen los distintos planes de incentivos, los resultados obtenidos en el plan de objetivos del año 2021.