Una persona utilizando un smartphone.

Una persona utilizando un smartphone. Jonas Leupe Unsplash / Europa Press

Tecnología

Las comunicaciones acumulan una caída de precios del 23% en 20 años y llevan al sector a una permanente deflación

La reducción de operadores gracias a la fusión de Orange y MásMóvil puede frenar esta tendencia, que contrasta con la subida del 50% del IPC general.

13 marzo, 2022 03:09

Noticias relacionadas

Los servicios de telecomunicaciones a los que tienen acceso los ciudadanos españoles han cambiado enormemente en los últimos 20 años. En dos décadas se ha pasado del pago por minuto en las llamadas de telefonía móvil y conexiones de ADSL a tener smartphones con llamadas y datos ilimitados e Internet en el hogar de muy alta velocidad gracias a los despliegues de fibra óptica. 

Sin embargo, las empresas de telecomunicaciones también llevan tiempo denunciando que esta constante mejora del servicio que ofrecen a los clientes en un mundo cada vez más digitalizado no ha venido acompañada, en términos generales, de una subida de los precios que pagan los usuarios. 

Todo lo contrario, los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) o de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) muestran que las comunicaciones llevan tiempo inmersas en una tendencia deflacionista que contrasta con la fuerte subida de los precios que se ha registrado en el conjunto de la economía.

En concreto, tomando como punto de partida los datos de enero de 2002 publicados por el INE, los precios de las comunicaciones han registrado en los últimos 20 años un descenso del 23%. Una evolución muy diferente a la que ha marcado el Índice de Precios al Consumo (IPC) general en el mismo periodo, que ha subido un 50%. 

Y si se analizan los últimos datos publicados este viernes por el INE se ve que la tendencia, por el momento, no tiene visos de que vaya a cambiar. En febrero, el IPC registró un incremento interanual del 7,6%, mientras que las comunicaciones bajaron un 0,6%, lo que le convirtió en el único de los doce grupos que conforman el índice en marcar tasas negativas. 

Por su parte, los datos de la CNMC sobre el gasto de los hogares en servicios de telecomunicaciones también muestran que los precios que pagan por ellos apenas han subido con el paso de los años. Por ejemplo, en el segundo trimestre de 2021 los hogares con paquete cuádruple (telefonía fija y móvil y banda ancha fija y móvil) pagaban al mes 47,6 euros, frente a los 49,5 euros del cuarto trimestre de 2013, cuando la Comisión empezó a registrar datos sobre este servicio.

En el caso del paquete quíntuple, que incluye también televisión de pago, el precio que pagaban los hogares a cierre del segundo trimestre de 2021 era de 77,8 euros. Una cifra que supera los 67,9 euros del cuatro trimestre de 2014, el primero con datos disponibles, pero que es similar a la que se pagaba a principios de 2017 y está por debajo de los máximos de 80,8 euros que se marcaron a finales de 2019.

Impacto en los ingresos

Esta tendencia deflacionista que registra desde hace años el mercado también ha tenido consecuencias en términos financieros para los operadores de telecomunicaciones, que han visto caer sus ingresos totales en nueve de los últimos doce ejercicios, según los datos recopilados por la CNMC.

De hecho, en el año 2020 el sector de las telecomunicaciones facturó un total de 32.617 millones de euros. Muy lejos de los 44.080 millones de euros que ingresó en 2008.

Y todo ello en un entorno en el que las compañías han tenido que llevar a cabo importantes inversiones tanto para desplegar las redes de nueva generación, como han sido la fibra óptica y el 4G y lo será en breve el 5G, como para aumentar su capacidad para absorber el incremento exponencial del tráfico que circula por ellas. 

Desde el sector achacan esta tendencia a la baja de los ingresos y los precios, a la dificultad para rentabilizar las inversiones, y a la excesiva competencia que existe en el mercado español. Y, sobre todo, al auge de ofertas muy completas y competitivas en el mercado del bajo coste.

A este respecto, un reciente informe sobre el sector de las telecomunicaciones en España elaborado por Oliver Wyman apuntaba que una las características que hacen del país un mercado especialmente competitivo es la excesiva presencia de operadores de bajo coste en el negocio convergente, ya que en otros países sólo están presentes en el mercado móvil.

Esta elevada competencia ha hecho además que la estrategia del "más por más" (ofrecer más datos, más velocidad o más contenidos a cambio de una subida de precio) que han seguido los principales operadores del país no haya sido capaz en muchas ocasiones de tener el efecto deseado a la hora de recuperar las inversiones realizadas con nuevos ingresos. 

Oportunidades en la consolidación

En este contexto, los expertos ven en la reducción del número de operadores de telecomunicaciones en España un primer paso para reducir la excesiva competencia que existe en el sector y llevar a mayor una racionalización del mercado que, en última instancia, se traduzca en una subida de los precios minoristas. 

De hecho, Carlos Winzer, vicepresidente sénior de Moody's afirmaba esta semana a EL ESPAÑOL-Invertia que, previsiblemente, la fusión de Orange y MásMóvil anunciada esta semana puede llevar a lo que se conoce como una "reparación del mercado", que aliviará un poco la presión de la competencia y permitirá subidas de precios.

Según Oliver Wyman, la experiencia histórica demuestra que los procesos de consolidación pueden mejorar las cuentas financieras de las operadoras. Así ocurrió a partir de 2015 tras las fusiones de Vodafone-Ono y Orange-Jazztel, que llevaron a las compañías a iniciar la ya mencionada estrategia de recuperación basada en el "más por más".

Sin embargo, esta mejoría no duró mucho, ya que en 2018 los ingresos volvieron a decrecer debido a la fuerte competencia de actores como MásMóvil, que se afianzó como cuarto operador convergente tras hacerse con los remedies impuestos por Competencia en la fusión de Orange y Jazztel

Los datos del INE muestran que esta tendencia deflacionista que registran los precios de las comunicaciones desde hace 20 años también registró un leve respiro tras la concentración del mercado efectuada a partir de 2015. Pero al igual que ocurrió con los ingresos de las operadoras, esta mejoría no duró mucho y los precios de las comunicaciones volvieron a caer. 

Los analistas de BofA consideran que la fusión de Orange y MásMóvil puede ser un "viento de cola significativo" para el comportamiento del sector de las telecomunicaciones tanto en España como en Europa, reduciendo la probabilidad de que haya movimientos disruptivos de precios y abriendo la puerta a que estos suban y se mejore el retorno de las inversiones realizadas.