Los beneficios de Apple se dispararon durante los pasados seis meses un 14 % impulsados por el aumento de las ventas de teléfonos iPhone y un crecimiento significativo de sus servicios, la gran apuesta de futuro de la compañía.
El beneficio neto entre octubre y marzo de 59.640 millones de dólares (56.800 millones de euros), por encima de los obtenidos en el mismo período del ejercicio anterior.
En su primer semestre de 2022 (el año fiscal de Apple empieza en octubre), la empresa de Cupertino (California, EEUU) ingresó 221.223 millones de dólares, por encima de los 201.023 millones facturados en los mismos seis meses del ejercicio anterior.
Los inversores de la compañía de la manzana mordida se embolsaron durante este período 3,65 dólares por título, frente a los 3,11 de hace un año.
Por segmentos de negocio, el teléfono iPhone representa, con 122.198 millones de dólares en ingresos, más de la mitad del total de facturación de la compañía.
Aunque Apple no detalla los modelos de teléfono a los que corresponde la facturación, es razonable que una gran parte de estos provengan de las ventas del nuevo iPhone 13, que salió a la venta a finales de septiembre, es decir, justo antes de que empezase el período hoy analizado.
Por detrás del iPhone, aunque a mucha distancia, se sitúan los servicios, una de las mayores apuestas de la empresa durante los últimos años, en los que ha lanzado multitud de plataformas de suscripción en sectores tan diversos como el entretenimiento televisivo, los videojuegos, la prensa, el ejercicio físico y la música.
Entre octubre y marzo Apple ingresó 39.337 millones de dólares por estos servicios de suscripción; a los que siguieron la tecnología para la ropa y el hogar (un segmento en el que se contabilizan las ventas, entre otros, de los relojes Apple Watch y de los auriculares AirPods), con 23.507 millones de dólares.
Por su parte, los ordenadores Mac (el producto original de Apple) cosecharon unos buenos resultados de ventas y permitieron a la firma ingresar por este concepto 21.287 millones de dólares, por encima de los 17.777 millones del mismo período de 2021.
La nota negativa, sin embargo, la pusieron las tabletas iPad, cuyas ventas bajaron a nivel interanual y pasaron de aportar 16.242 millones de dólares a las cuentas de la compañía a únicamente 14.894 millones.
Coyuntura económica internacional
La empresa de Cupertino logró más de un tercio de sus ingresos en el mercado americano (incluyendo EEUU, Latinoamérica y Canadá), la región de mayor negocio para la compañía.
Detrás de América se situó el mercado europeo, seguido muy de cerca por el chino, y a mayor distancia Japón y el resto de la región Asia-Pacífico.
En la llamada con inversores posterior a la presentación de cuentas, el consejero financiero de Apple, Luca Maestri, alertó de que, pese a los buenos números, la coyuntura económica internacional representa serios riesgos para el negocio de la empresa durante los próximos meses.
Maestri citó, entre otros, los problemas que todavía persisten en la cadena de suministro global por la pandemia de covid-19, con el cierre de fábricas en China, donde tiene la mayor parte de la producción.
Además, la demanda de iPhones y otros productos de la compañía de la manzana mordida también se está resintiendo en el mercado chino precisamente por las restricciones a la movilidad.
Los buenos resultados presentados por Apple, sin embargo, no convencieron a los inversores en Wall Street y las acciones de la empresa se dejaban un 1,19 % hasta los 161,72 dólares por título en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de los parqués neoyorquinos.