La primera convocatoria de ayudas públicas destinadas a financiar el despliegue de las redes 5G en España con los fondos europeos Next Generation han quedado finalmente desierta. Los 150 millones de euros que se iban a destinar a impulsar la quinta generación de telefonía móvil en el ámbito rural y las redes de transporte se destinarán ahora a otros programas relacionados con esta tecnología.
Así lo ha confirmado Roberto Sánchez, secretario de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, en declaraciones a los medios tras participar en el 36º Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones organizado por la patronal de la industria digital Ametic.
El Gobierno lanzó a principios de verano el programa UNICO 5G Redes - Pasivas, destinado a impulsar y acelerar el despliegue de la tecnología 5G en carreteras y ferrocarriles (nacionales y transfronterizos) y en determinadas zonas rurales que cumplían unos determinados requisitos.
Aunque cuatro compañías superaron la fase de preevaluación (Cellnex, American Tower, Vantage Tower y Totem), en el proceso final no se presentó ninguna propuesta por parte de estos operadores de infraestructuras de telecomunicaciones que pudiera ser evaluada.
Antes de la convocatoria, el sector ya había mostrado sus dudas sobre su eficacia dado que estaban destinadas únicamente a financiar la parte pasiva de las redes. A final, ni la introducción de algunas mejoras respecto al planteamiento inicial, como permitir que las ayudas se usen para actualizar algunos emplazamientos de telecomunicaciones ya existentes, ha conseguido atraer la atención de las operadoras.
Parte pasiva y activa
Y es que la convocatoria iba dirigida únicamente a la parte pasiva de la infraestructura móvil (torres, mástiles, suministros, infraestructura backhaul…) y las ayudas no podían utilizarse para el equipamiento activo de la red 5G, como son las antenas y los equipos que permiten la emisión y recepción de las señales de telefonía.
Un aspecto muy demandado por el sector y en el que ya se encuentra trabajando la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones. En concreto, Sánchez ha asegurado que están ultimando las negociaciones con la Comisión Europea para lograr su autorización a estas ayudas que irán destinadas a la parte de activa de la red.
Otro de los programas relacionados con el 5G son las ayudas a mejorar la conectividad de emplazamientos móviles mediante fibra óptica (UNICO 5G Redes-Backhaul Fibra Óptica), un plan que está mucho más avanzado y del que esperan poder publicar la convocatoria a mediados del mes de octubre.
Sánchez no ha querido dar detalles sobre el importe definitivo de las ayudas que tendrán ambos programas, ya que al quedar desierto el programa relativo a las ayudas pasivas se reubicará previsiblemente en estos programas.
Subasta 5G
Por otro lado, Roberto Sánchez también ha confirmado que antes de que termine el año el Gobierno iniciará la licitación de la banda de espectro de los 26 GHz, la única que quedaba pendiente de las tres frecuencias asignadas al despliegue del 5G y que es uno de los hitos de 2022 recogidos en del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
A este respecto, ha adelantado que es "muy probable" que esta nueva banda cuente con una franja de espectro reservada a usos industriales en régimen de autoprestación, lo que abriría la puerta a que empresas que no sean operadores de telecomunicaciones dispongan de frecuencias para desplegar sus propias redes.
Con el objetivo de cerrar los detalles de este modelo de autoprestación, como decidir qué parte de la banda que se destinará a este servicio y cuál al proceso habitual de subasta, el Ejecutivo tiene previsto lanzar en unas semas una nueva consulta pública acerca de las bases de la licitación de la banda de los 26 GHz.